Según recoge LA RAZÓN, Pilar Eyre desgrana, en exclusiva para “Lecturas”, la figura de uno de los nombres que más ha sonado en las últimas semanas por su educación y saber estar en defensa de su familia: Pablo Urdangarin. El hijo de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, que tiene un futuro prometedor en el balonmano español, se ha convertido en la “estrella” de la familia y en su portavoz improvisado. Sin embargo, Pablo, y sus hermanos, esconden una infancia marcada por el acoso y los desprecios.
Séptimo en la línea de sucesión al trono, ya que su madre la Infanta Cristina no ha renunciado a sus derechos sucesorios ni los de sus descendientes, “Pablo tiene el tratamiento de excelentísimo señor y debería recibir honores de grande de España allá donde fuere”, cuenta Eyre. “Podría alternar con la flor y nata de los príncipes reales europeos, pero no lo han educado por este camino”.
La infancia de Pablo Urdangarin y de sus hermanos ha estado marcada por la tragedia. “Los desprecios fueron constantes”, asegura Eyre en exclusiva. “Con el caso Nóos, la familia se trasladó a Washington. Los niños lo pasaron mal en el colegio; el mayor, Juan, sufrió ‘bullying’”. Los hijos de la infanta tuvieron que enfrentarse al escándalo siendo todavía muy pequeños.
“Un periodista que fue a hacerles un reportaje me contó: “Cuando ven un fotógrafo bajan la cabeza, dan mucha pena. Juan, con lo grandote que es, los protege, los coge por el hombro como si fueran sus polluelos”, relata Eyre.