Según recoge Informalia, María Teresa Campos se ha abierto en canal en una entrevista con Kiko Hernández, en la que no ha dejado títere con cabeza. En ella, insinúa que echa de menos pasar más tiempo con Rocío Carrasco y desvela episodios de su pasado, como que se fumó un porro con Joaquín Sabina durante una entrevista en la radio: "Le dije: ¡Pásamelo!".
No obstante, uno de los titulares más sorprendes ha llegado a la hora de hablar de Ortega Cano y Rocío Jurado: "Un día estaban celebrando la comunión del niño y la niña que habían adoptado [Gloria Camila y José Fernando]. Tocaron una música y Ortega me sacó a bailar porque Rocío estaba atendiendo a la gente".
Entonces, ha recordado en Diez Minutos lo que, según ella, le ocurrió con el diestro durante esta celebración: "Me puse a bailar y me dice Ortega: '¿Tú sabes una cosa? Que me estás poniendo, y a mí no me ponen más que las mujeres que son muy mujeres'".
A continuación, ha asegurado que ha escuchado ciertas cosas que no puede contar en público: "Se cuentan muchas cosas en el sentido de que Rocío también vivía su vida como artista y como todo eso. Pero yo creo que Ana María Aldón a lo mejor nos podía contar más cosas, a ver cómo es con ella. Porque yo he oído cosas, pero como no las he visto...".
En este sentido, también ha desvelado una conversación que mantuvo con Rocío Jurado y que se le quedó grabada: "Los niños los adoptó Ortega porque quiso. Un día en el coche recibí una llamada de teléfono y era Rocío Jurado y digo: 'Rocío, ¿qué haces?' y me dijo: '¡Ay Teresa, pues yo aquí poniendo lavadoras!' ¡Y el otro quiso haber adoptado más. Quería cuatro, cinco o seis".
María Teresa Campos ha sido, desde que murió la chipionera, uno de los apoyos más grandes de Rociito. En la guerra familiar entre ambos bandos siempre le ha mostrado su apoyo, motivo por el que en ocasiones no tiene reparos a la hora de desvelar ciertos asuntos relacionados con la otra parte del clan.
Con Rocío, eso sí, ya no pasa tanto tiempo como le gustaría porque su amiga tiene una agenda muy ocupada. Tanto es así que no asistió a la boda de su nieto, el hijo de Carmen Borrego, celebrada el pasado sábado 14 de mayo.
"Yo creo que Rocío tenía alguna cosa sobre su madre ese día, pero no sé. Últimamente estamos menos unidas, porque como ella ha hecho muchas cosas y tal... Pero antes, los fines de semana estaban en mi casa", ha sentenciado.
