Un artículo de Jesús Manuel Ruiz publicado en exclusiva en EsDiario
Unos lo etiquetan como el chófer de Teresa Campos. Otros como el hombre de confianza de la comunicadora malagueña. Todo es verdad. A medias. Es algo más. Es el tercer hijo de Teresa Campos. El jovencito que comenzó cuando tenía 18 años con Campos madre en TVE. Desde entonces hasta hoy. Muy pocas veces ha roto su silencio. Lo hizo en una ocasión para contar quién se escondía detrás de Edmundo Arrocet. Gustavo ha mantenido una posición discreta en todo lo sucedido en la familia.
Desde hace una semana, Gustavo está en primera línea de la actualidad televisiva como persona que ha podido filtrar las informaciones de la familia. Lejos de la realidad. La familia no necesita terceros para filtrar. Lo hacen directamente. Es un medio de vida. Y no el tercer hijo. Gustavo Guillermo se ha convertido noticioso a raíz del apoyo que ha prestado a Belén Rodríguez. No es algo nuevo.
Gustavo es amigo de sus amigos hasta la médula. No amigos televisivos. Los de siempre. Con Belén mantiene una relación que se remonta 25 años atrás. El hombre de confianza de Teresa Campos mantiene amistades de siempre. Desde su infancia. Y es con la gente que se reúne en la intimidad de su casa. Lejos del gourmet televisivo.
Gustavo Guillermo no contará nada por respeto a Teresa Campos
Estos días Gustavo Guillermo quiere mantener silencio. Es mejor y no para él sino para el resto de la familia Campos. Gus no contará nada por respeto a Teresa Campos. Es su segunda madre. Y así se lo hace saber con el día a día y la confianza prestada en los momentos más complicados en la vida económica de la presentadora nacida en Tetuán.
Conoce a la familia a la perfección. No sólo a Terelu y Carmen sino también a los nietos de Teresa. Qué papel juegan y han mostrado en la vida con sus luces y sombras. Carmen Borrego puede provocar a Gustavo Guillermo. Es conocedora de que no contará nada. Al menos mientras viva Teresa Campos. Gustavo es fiel a los suyos. Y Teresa Campos es él mismo.
