Según recoge Libertad Digital, aunque siempre ha preferido mantenerse en un segundo plano, Carlos Seguí ha hablado por fin sobre su complicado litigio con Patricia Conde tras su polémico divorcio. Esta semana se ha confesado en la revista Vanity Fair y ha hablado sobre cómo se encuentra actualmente, cómo es la relación con su hijo y qué piensa sobre los problemas que tuvo con su ex mujer.
Seguí recuerda su divorcio como"una pesadilla".Conde le acusó de malos tratos psicológicos y pidió dos años y medio de cárcel para él. "Era una estrategia procesal para quedarse con el niño. Si un abogado te propone: ‘si dices esto, conseguirás que tu hijo viva en Madrid’, te puedes dejar llevar. Yo no lo hubiera hecho. Me parece inmoral. Estuve 35 días sin ver a mi hijo. Tenía siete meses y tuve miedo de que no supiera quién era su padre".
En la entrevista también cuenta cómo empezó su noviazgo con la presentadora: "Fue muy intenso. Muy de botella de champán. Maldivas, Londres, París, Roma… todo de película. Cuanto más fuerte es el enamoramiento, más fuerte es la hostia. Si vuelvo a enamorarme, quisiera que fuera algo más tranquilo, que empiece con una relación de amistad".
Actualmente, Seguí vive centrado en su trabajo y en su faceta como padre: "Ahora disfruto de las cosas sencillas. Ir a pescar con mi hijo, navegar, viajar con mis amigos…". A pesar de todo lo que ha ocurrido, Carlos desvela que su relación con Patricia es "cordial". "Por el bien de nuestro hijo. Y espero que dure mucho tiempo. Necesito llevarme bien con ella. Estoy seguro de que ella también lo ha pasado mal. Un divorcio es duro para ambas partes".
La expareja de Patricia Conde está centrada en sus negocios. Carlos tiene una empresa llamada Charly & Lucas Promotions, y también tiene negocios de restauración. Es socio de algunos restaurantes de Madrid y Palma de Mallorca. Además, acaba de probar suerte en un nuevo negocio: una firma de moda llamada Mews.
Fuente: Libertad Digital
