Cristina Tárrega reniega de su cuñada, la "amiga íntima" de Isabel Pantoja, a la que ella presentó

Tárrega ha invocado al código de honor entre compañeros suyos de Telecinco y les ha prohibido informar sobre los asuntos que la relacionan con su cuñada y con su amiga Isabel Pantoja
Cristina Tárrega reniega de su cuñada, la "amiga íntima" de Isabel Pantoja, a la que ella presentó
photo_camera Cristina Tárrega reniega de su cuñada, la "amiga íntima" de Isabel Pantoja, a la que ella presentó

Según recoge Informalia, ni sabe ni quiere saber de ella. Al menos eso asegura Cristina Tárrega a sus amigos. Su cuñada, Nieves Quevedo, la hermana de su marido, el ex futbolista Mami Quevedo (abajo, con Tárrega), se ha convertido en la nueva protagonista del culebrón protagonizado por Isabel Pantoja desde que saliera a la luz que la cuidadora de doña Ana es la nueva "amiga íntima" de la madre de Kiko Rivera.

La tonadillera ha depositado en ella, que ejerce de ama de llaves de Cantora, toda su confianza, y dicen que, aparte de su hermano Agustín, en estos momentos tan duros, la señora Quevedo es la única persona con la que comparte confidencias.

Es con ella con quién pasa sus noches en vela fumando y bebiendo Coca-Cola. Y también fue ella la encargada de contestar a Chabelita cuando ésta la llamó desde La casa fuerte para preguntarle si quería que fuera a Cantora. ¿Pero qué opina Cristina Tárrega de ella? ¿Se lleva bien con la hermana de su marido?

Públicamente la periodista aún no se ha pronunciado y, según ha podido saber Informalia, pero Cristina ha comentado en su círculo más cercano que Nieves Quevedo y ella no tienen relación desde hace años y mucho menos ahora. Tárrega ha invocado al código de honor entre compañeros suyos de Telecinco y les ha prohibido informar sobre los asuntos que la relacionan con su cuñada y con su amiga Isabel Pantoja. Otra cosa es que en Telecinco, donde Tárrega cuenta sobre todo con la protección de su amiga Ana Rosa Quintana, todos respeten la omertá exigida por la valenciana en lo que  incumbe a las personas implicadas en la relación de su cuñada con Pantoja. 

Para muestra un botón: el día que se publicó la información, en El programa de Ana Rosa ni siquiera lo hablaron. Dicen que Tárrega "está avergonzada" y que teme que ahora todos piensen que es ella "el topo o la topa" la que facilita información de lo que pasa en la finca, gracias a que tenga hilo directo con la tonadillera.

Poco se sabe de lo que ocurre intramuros de Cantora, mientras en el exterior, estallan rayos y truenos mediáticos. Se dice que por la finca solo pululan los escasos miembros de personal que se ocupan del campo. En el enorme caserón moran Isabel, su hermano Agustín, doña Ana, la madre de ambos, y su cuidadora, mucho más que un ama de llaves al uso: una persona con quien comparte Isabel confidencias, desvelos y noches de insomnio.

No debemos olvidar sin embargo que, como ya adelantó Informalia en exclusiva, fue Tárrega quien llevó a su cuñada a Cantora y le buscó trabajo con Pantoja.

En 2018, dos años después de la salida de Isabel Pantoja de la cárcel, si descontamos dos apariciones en los escenarios, la artista sevillana seguía recluida en la finca que ella y su hijo Kiko heredaron de Paquirri.

Isabel tenía deudas millonarias pendientes, pagaba hipotecas y multas como podía, vendiendo propiedades y un día recibió una oferta muy tentadora. La empresa valenciana de cosmética Sesderma la quería el 21 de setiembre de aquel año como protagonista de la fiesta de inauguración de sus nuevas instalaciones. Isabel no aparecía en un acto publicitario desde hacía muchos años. Su ausencia era un valor añadido para su reaparición y además, una semana antes, había causado sensación su inesperada llamada en directo a Sálvame para contrarrestar las declaraciones de su hija a Mila Ximénez. Allí arremetió contra Dulce, la antigua niñera de Chabelita, a quien Pantoja le ha interpuesto demandas millonarias y donde desmintió que Cantora fuera un castillo de vampiros.

Entonces Isabel estaba en la cima del interés mediático y es en aquel momento cuando Cristina Tárrega, colaboradora de Sesderma y amiga de Isabel Pantoja desde los tiempos en que la valenciana, amiga íntima de Ana Rosa Quintana, trabajaba en Cadena Dial propuso a la firma de cosmética que contrataran a la artista sevillana como invitada estelar de la fiesta de Valencia.

Se habló de un caché de 100.000 euros, pero la propia Tárrega aseguró que era mucho más. Aquello fue un regalo para la tonadillera en momentos de penuria económica. Por ello, la trianera se mostró muy agradecida con la presentadora. Fue entonces cuando Tárrega le habría pedido a Isabel, que contratara a su cuñada Nieves Quevedo, necesitada de ayuda, para que entrara a formar parte del servicio de Cantora, y cuya misión sería cuidar de doña Ana, la madre de Isabel, mayor y con una salud muy delicada. Hoy Nieves Quevedo podría ser la versión española de la inolvidable ama de llaves de la película Rebecca, de Hitchcock, guardiana de todos los secretos de Cantora, el Manderley gaditano, la mansión más hermética de España.

Hay que recordar que de unos meses a esta parte, Tárrega se ha convertido en una firme defensora de Isabel. De hecho, Cristina alardea de que habla de vez en cuando con su amiga Isabel. Así lo ha dicho en numerosas ocasiones. Ahora, la cosa ha cambiado y prefiere estar callada. Otra cosa es que la obliguen a tocar el tema. Recordemos que a su cuñada le han sacado a relucir un pasado sórdido: en 2009, fue detenida por un feo asunto relacionado con la desaparición de unas joyas en un establecimiento. Después de pasar una noche entre rejas, Nieves declaró que lo había hecho "por apuros económicos". Ahora todo aquello sólo forma parte del pasado y parece que se gana el pan honradamente, pero al lado de la tonadillera más famosa de España.

Comentarios