Castilla-La Mancha cuenta, desde este miércoles, con restaurantes distinguidos con estrellas Michelin en las cinco provincias, un acontecimiento que celebran los restauradores que afirman que, con las ocho estrellas que ya alumbran los fogones de la región, se reconoce el trabajo de los cocineros de la tierra.
De las ocho, dos son para el restaurante Maralba, en Almansa (Albacete) y su chef, Fran Martínez, destaca que en esta casa están todos "muy contentos", porque por tercer año mantienen las dos estrellas Michelin.
En declaraciones a Efe, señala que la distinción "es un orgullo porque reconocen la cocina manchega y el trabajo que se hace en Albacete" y destaca que la gala Michelin se ha convertido para ellos "en un evento muy esperado y emotivo".
Apunta que, especialmente desde que tienen las dos estrellas, reciben a más visitantes extranjeros que acuden al restaurante siguiendo las recomendaciones de esta guía y, además, se muestra convencido de que Castilla-La Mancha seguirá creciendo en número de estrellas Michelin "porque hay compañeros que hacen muy buen trabajo".
De hecho, en esta edición se han producido dos incorporaciones, la del restaurante Retama en la localidad ciudadreleña de Torrenueva, y regentado por el chef toledano Javier Aranda, y la de Iván Cerdeño, que vuelve a la prestigiosa lista de restaurantes con su nueva propuesta ubicada en el Cigarral del Ángel.
Cerdeño ha afirmado, en declaraciones a Efe, que todo el equipo está feliz por "tener una vez más la estrella", pues ya la tuvo cuando regentó su anterior restaurante, y ha agradecido el reconocimiento "al trabajo de un equipo de personas que defienden la gastronomía de su tierra y lo viven de manera emocionante, para que el viajero se sienta identificado con Toledo y pueda decir que se ha comido un pedazo de Toledo".
Para Cerdeño, lo primordial a la hora de elaborar sus menús son los productos de temporada, el entorno y la memoria, recuperando "recetas casi olvidadas y productos que han ido cayendo en desuso", para poner en valor esas elaboraciones y que se recupere esa memoria.
Por ejemplo, ha señalado que en otoño, la caza es el principal ingrediente, sobre todo si se tiene en cuenta la "despensa cinegética tan fantástica" que son los Montes de Toledo, a lo que suma las sopas calientes, los tubérculos y otros productos típicos de la zona, como el mazapán o las anguilas de la ribera del Tajo, con los que se crea "un universo propio".
También en la provincia de Toledo, conserva su estrella Michelin el conocido chef Pepe Rodríguez, con su restaurante "El Bohío", en Illescas.
En el caso de la provincia de Guadalajara, los dos restaurantes que ya poseían una estrella Michelin, El Doncel de Sigüenza y El Molino de Alcuneza, han revalidado este reconocimiento de la guía gastronómica más prestigiosa del mundo.
El chef de El Doncel de Sigüenza, Enrique Pérez, no ocultaba este jueves su alegría por revalidar, por tercer año consecutivo, este reconocimiento.
"La incertidumbre no deja de estar porque no sabemos nunca cuándo han venido a comer, pero en parte estábamos tranquilos viendo la evolución que tenemos que ha sido buena y la apuesta y trabajo que venimos desarrollando", ha afirmado.
Fruto de este esfuerzo y trabajo, apunta, está este reconocimiento que les ha supuesto un revulsivo importante en clientes desde el primer año y siguen "en trayectoria ascendente desde 2017 en cuanto a visitas, perfil de cliente, ocupación total los fines de semana con un año de reserva vista y sobre todo y más difícil, con una importante ocupación en el día a día", que se sigue manteniendo y ha logrado incrementarse un 150% desde entonces.
"Esto nos ha permitido consolidar el equipo, aumentar la plantilla y sentir una gran satisfacción por ser un reclamo turístico más para Siguënza", añade.
Por su parte, Samuel Moreno, chef de El Molino de Alcuneza, se ha mostrado "muy contento por renovar este reconocimiento que da fuerzas para afrontar el año que viene" y seguir apostando por una propuesta diferente.
"Cada año hemos intentando mejorar al anterior y subir un peldaño más y consolidar lo que tenemos", afirma este chef quien reconoce que ayer fue un día de nervios.
Moreno afirma que este año, tras lograr la estrella Michelín en la pasada edición, "el tirón ha sido enorme con un empuje muy muy grande" y que han registrado "una explosión de clientes".
También el chef del restaurante "Trivio" de Cuenca, Jesús Segura, ha mostrado su satisfacción por haber mantenido la Estrella Michelin obtenida el año pasado, y ha considerado que es un "reconocimiento a todo el equipo, a su trabajo diario" y un acicate para seguir trabajando en la misma línea desde el establecimiento de la capital conquense.
En declaraciones a Efe, Segura ha reconocido que supieron que mantenían la Estrella el mismo miércoles por la tarde, y admite que se pasa "mucho miedo" antes de saber si se consigue o no revalidar esta distinción.
Asimismo, ha mostrado su satisfacción porque Castilla-La Mancha tenga Estrellas Michelin en todas las provincias, a la hora de atraer un turismo gastronómico que pueda incluso establecer circuitos, como hace en otras regiones españolas.
