La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha mostrado su satisfacción ya que el Ministerio ha atendido sus demandas respecto a nuevas plantaciones de viñedo, que en 2018 supondrá un incremento del 0,52 por ciento de la superficie que había plantada a fecha 31 de julio de 2017.
En un comunicado, la organización agraria ha advertido de que en un futuro habrá que incluir mejoras, analizar la situación e incrementar el control para ver a quién se otorgan estas autorizaciones.
El responsable de Vino de UPA, Alejandro García-Gasco, ha mostrado su satisfacción al comprobar que el Ministerio ha tomado en consideración las propuestas de la organización en el Real Decreto que fija la superficie que se podrá conceder para autorizaciones de nuevas plantaciones de viñedo en 2018.
La cifra se ha fijado en el 0,52 % de la superficie plantada de viñedo a 31 de julio de 2017, lo que equivale a 4.950 hectáreas.
García-Gasco ha señalado que el Ministerio ha recogido la postura de UPA, "que fue de continuidad pese a la reducción de la producción que estamos teniendo" y ha apuntado que es el momento de hacer un análisis del motivo por el cual "cada vez se marcha más gente del sector".
Así, el responsable de Vino de UPA ha señalado que pese a la petición de autorizaciones, cada año se arranca más viñedo provocado, probablemente, por la falta de rentabilidad, y ha corroborado que este año que concluye ha habido una bajada "importante" de hectáreas a nivel nacional.
"Esto quiere decir que el sector no se ve como rentable; con lo cual tendríamos que ser precavidos y controlar a quien se le dan estas hectáreas", ha reflexionado.
