Un total de 25 trabajadores han fallecido en el primer semestre de 2022 en Castilla-La Mancha en su puesto de trabajo, de los cuales 20 han perdido la vida en jornada laboral y cinco en desplazamientos a los centros de trabajo, lo que supone un aumento del 38,9 % respecto al mismo periodo de 2021.
Según ha explicado este miércoles en una rueda de prensa la secretaria de Diálogo Social, Institucional y Salud Laboral de Comisiones Obreras de Castilla-La Mancha, Raquel Payo, es una situación "absolutamente dramática", ya que la región partía de una mala gestión preventiva y estos datos no dejan de empeorar la situación.
Payo ha calificado de "primer orden" el problema de la siniestralidad en la región, ya que en este primer semestre de 2022 ha aumentado un 17 % tras registrar 15.855 accidentes de trabajo, 2.300 más que en el mismo periodo de 2021, lo que supone una "pésima noticia en materia de salud y seguridad en Castilla-La Mancha".
Del total de accidentes, 14.908 fueron en jornada y 947 tuvieron lugar en los desplazamientos, y en provincias, 6.009 se produjeron en Toledo, 3.197 en Ciudad Real, 2.541 en Guadalajara, 2.695 en Albacete y 1.413 en Cuenca, la única provincia que redujo la cifra de accidentes en el primer semestre de 2022 respecto al año pasado, con un 7,5 % menos.
La situación de la provincia de Guadalajara "preocupa mucho", ha afirmado Payo, ya que no solo aglutina la mayor siniestralidad del país, sino que supera en más de un 72 % la tasa de incidencia de la media nacional.
De este modo, ha asegurado que la provincia y la comunidad tiene un problema que trasciende del ámbito laboral y hay que solucionar, bien trasladando todas las deficiencias a la inspección de trabajo o bien aplicando, por parte de las empresas, la legislación en la prevención de riesgos laborales.
La secretaria ha destacado que "prácticamente la totalidad de los accidentes laborales que tienen lugar en los centros de trabajo se podrían evitar con unas necesarias medidas preventivas que la ley de prevención de riesgos laborales pone negro sobre blanco y por tanto es fundamental que sea de aplicación".
Así mismo, ha considerado "fundamental" la sensibilización y la formación en materia preventiva, para la que han llevado a cabo cuatro campañas sobre la exposición al calor y al sol, el conocimiento de la evaluación de riesgos por parte de los delegados y trabajadores, el uso de pantalla para la visualización de datos y las caídas en altura.
Además, para el último trimestre CCOO llevará a cabo campañas para abordar el riesgo en el embarazo y los periodos de lactancia, el trabajo con el frío extremo, la seguridad vial y el consumo de fármacos en el ámbito laboral, un problema que preocupa al sindicato tras aumentar más del 7 % en este primer semestre.
"Son muchos los trabajadores de Castilla-La Mancha que se automedican para evitar los dolores aparejados con las condiciones inadecuadas de trabajo", ha manifestado Payo, quien ha explicado que ese aumento se ha dado, sobre todo, en sectores feminizados como hostelería, enseñanza, cuidado en domicilios y sanidad tras las "condiciones extremas" a las que se sometieron durante la pandemia.
Payo ha asegurado que en el último trimestre de 2022 seguirán impulsando la sensibilización y la formación porque es fundamental acabar con la "sangría" que implica la siniestralidad en Castilla-La Mancha.
"Es inadmisible que las personas pierdan la vida o la salud cuando van a ganarse el sustento. Lo que no se conoce, no se reclama y, por tanto, es fundamental que esa información llegue a los trabajadores para situar la prevención de riesgos laborales como un tema capital en las empresas de nuestra región", ha expresado.