El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha aprovechado su primer discurso tras ser reelegido al frente del sindicato para pedir a Gobierno, oposición y agentes sociales un "gran pacto de estado" para aprovechar las oportunidades que ofrecen los fondos europeos.
"UGT pide a las fuerzas políticas, sociales, patronal y sindicatos, que seamos capaces de construir un gran pacto de futuro, que no va a durar solo esta legislatura, que nos permita hacer una hoja de ruta y abordar los déficit", ha dicho Álvarez en la clausura del 43 Congreso Confederal que termina este jueves en Valencia.
"Sería una pena que por razones políticas se vaya a hacer puñetas", ha dejado claro Álvarez tras ser proclamado líder del sindicato, con el 85,83 % de los votos a favor, para otros cuatro años.
En su discurso de cierre del congreso, Álvarez ha insistido ante la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en las principales reivindicaciones del sindicato, que pasan por derogar las reformas laborales, aprobar pronto la de pensiones y subir ya el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) "sí o sí".
"No tengo ninguna duda de que este Gobierno es el mejor que podemos tener los trabajadores de España", ha concedido Álvarez pero debe hacer la "mejor política posible" y, por eso, ha incidido, "vamos a insistir".
"Tiene que haber cambios", ha reclamado Álvarez que ha emplazado a hacerlos con o sin el acuerdo de la patronal, evitando darles derecho de veto de facto.
También ha urgido a recuperar los instrumentos de una negociación colectiva "rota", a lo que la ministra de Hacienda, presente en el acto, se ha comprometido "incrementando el empoderamiento" de los trabajadores para que puedan defender sus derechos "en pie de igualdad".
Álvarez ha denunciado la lacra de la siniestralidad laboral, y no ha querido dejar atrás la necesidad de luchar por una sociedad igualitaria y respetuosa con el medioambiente.
Y ha abogado por una fiscalidad más justa: "Mienten los que hablan de libertad y bajan impuestos".
UGT, SIN MIEDO A INNOVAR
"Somos muy pocas organizaciones que cumplimos mas de 100 años en España con nuestras siglas, con nuestros errores y con nuestras virtudes" ha dejado claro Álvarez, quien se ha mostrado "muy muy orgulloso" de dirigir UGT.
También ha pedido al sindicato que no tenga miedo "a cambiar las cosas", a "innovar" y ser la avanzadilla de las transformaciones que necesita el país.
El cierre ha transcurrido ante la atenta mirada del anterior líder del sindicato, Cándido Méndez, que ha seguido el acto desde la primera fila, con la lectura de una carta del ex secretario general Nicolás Redondo, que pedía "dar respuestas adecuadas y eficaces si queremos una España más social y más igualitaria".
En la clausura del Congreso, el segundo que UGT celebra fuera de Madrid en toda su historia, ha intervenido por vídeo el secretario general de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), Luca Visentini, quien se ha comprometido a conseguir el reconocimiento de la covid-19 como enfermedad profesional en la UE.
El director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Guy Rider, ha asegurado que "sin el diálogo social constructivo y unos sindicatos fuertes, democrático e independientes, la búsqueda de la justicia social y el trabajo decente se hace más difícil o, en ocasiones, imposible".
También ha defendido el diálogo social el presidente del grupo de trabajadores del Comité Económico y Social Europeo, Oliver Röpke, quien ha resaltado la regulación sobre los repartidores ("rider"), porque combina un empleo innovador con unos fuertes derechos sociales.
En el acto de cierre de este 43 Congreso también ha participado el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; el secretario general del PCE, Enrique Santiago; y la presidenta del PSOE, Cristina Narbona; y ha contado con la presencia de la directora general de Trabajo, Verónica Martínez; el líder de Más País, Iñigo Errejón; o el presidente de la patronal valenciana CEV, Salvador Navarro.
