El secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, Paco de la Rosa, se ha fijado como objetivo de su recién estrenado mandato "redoblar esfuerzos" en la defensa de los trabajadores "más desfavorecidos", un sector de la población que pese a tener trabajo "pasan hambre y rozan los umbrales de la pobreza". Para ello propone "inventar mecanismos nuevos utilizando el ingenio".
En una entrevista con Europa Press, ha dicho que el futuro del sindicato pasa por esos empleados, "los más indefensos frente a la legislación laboral actual, que no llegan a fin de mes y cuyo número va creciendo de manera desproporcionada".
"Ahí hay que centrarse. Tenemos que basar nuestro futuro en ellos y queda una labor importante. El sistema es cada vez más neoliberal y despiadado en el ámbito internacional y el deterioro de las condiciones laborales en Europa ha sido notable", ha manifestado.
Para llegar a este sector de la clase trabajadora, De la Rosa propone "inventar mecanismos nuevos utilizando el ingenio", toda vez que la problemática de este colectivo viene marcada por no tener sus condiciones laborales reguladas y por lo tanto "estar sometidos a la voluntad del empresario" y sin que les afecte la negociación colectiva.
La estrategia pasa por, desde la acción sindical, "forzar para que los gobiernos y las patronales, de manera consensuada y con diálogo social, implementen mecanismos para que estos trabajadores tengan convenios".
"Ahí tenemos que llegar, pero no por supervivencia del sindicato, sino por supervivencia de la clase trabajadora. Si no damos respuesta, el sistema pasará por encima de todos y terminaremos con condiciones laborales deplorables", ha alertado.
DOS AÑOS DE CRECIMIENTO CONSTANTE
El sindicalista ha puesto de manifiesto que, toda vez que ha pasado lo peor de la crisis, su formación ha registrado "dos años de crecimiento constante" en los que además "ha recuperado espacio", algo que ha ligado al hecho de que hay conciencia de que el sindicalismo de clase "es el instrumento para cambiar las cosas".
En todo caso, ha dicho que hay que ser críticos: "Seguro que no lo hemos hecho todo lo bien que podíamos, pero creo que no lo hemos hecho tan mal y hemos capeado uno de los momentos más difíciles de la historia sindical", ha afirmado.
"BIEN ACOGIDO" POR NICOLÁS, PERO LE PIDE "MÁS COMPROMISO"
Pocos meses después de suceder al frente de CCOO a José Luis Gil, Paco de la Rosa ha asegurado que se ha sentido "bien acogido" tanto por el líder de UGT, Carlos Pedrosa, como por el presidente de los empresarios castellano-manchegos, Ángel Nicolás, a quien considera "un amigo" que le ha hecho "muy fácil la entrada y el inicio de la andadura en un escenario tan grande como es Castilla-La Mancha".
En cuanto a sus peticiones a Cecam, ha avanzado que, "desde la amistad", tiene que reclamarle "más compromiso, sobre todo en la negociación colectiva". "Hay que apostar más por una negociación sectorial de carácter autonómico, algo que reforzará a empresas y trabajadores".
En su opinión, gestionar bien la negociación colectiva desde ambas partes "puede hacer a la región más competitiva".
"Creo que hay que ceder en autonomía provincial para conseguir un bien mayor a través de grandes pactos regionales que nos hagan ser el motor de esta tierra", ha defendido.
Otro de los elementos donde quiere imprimir "ambición" desde el sindicato es en materia de salud laboral, teniendo en cuenta que hay estadísticas como las de la provincia de Guadalajara que son "preocupantes".
Según ha dicho, "si se cumpliera la legislación en las empresas, se eliminaría el 99% de los accidentes de trabajo". Es por ello que exige a la patronal "un compromiso exageradamente mayor en materia de prevención".
AUDITAR LA NECESIDAD DE TEMPOREROS EN LA REGIÓN
Por otra parte, el secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha ha propuesto una "nueva fórmula" para poner coto a las contrataciones fraudulentas en campañas agrícolas en la región, que pasa por un pacto entre empresarios del sector primario, sindicatos y los gobiernos autonómico y central para auditar las necesidades de temporeros en según qué cultivos y controlar el número de contratos que se realizan.
Durante la entrevista con Europa Press, De la Rosa ha puesto el acento en que en este sector los trabajadores no interponen denuncias en casos de abusos laborales por "miedo" a los empresarios y a perder su jornal.
En su opinión, los conflictos laborales registrados en la temporada de verano en las provincias de Albacete y Cuenca son sólo "la punta de un iceberg mucho mayor", y para acotarlo "debería haber un mayor control" que no puede pasar por "multiplicar por diez la plantilla de inspectores".
"Se podría hacer un gran pacto entre sindicatos, Administración estatal, Administración autonómica y empresarios donde acordemos cómo queremos que sean las campañas y el salario a pagar", ha sugerido.
Para completar este diagnóstico, la propuesta pasa por elaborar un "mapa agrario" que sea un reflejo de "cuántas manos de obra pueden ser necesarias en las distintas campañas", sugerencia que ya ha hecho extensiva a la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de la región.
Según ha dicho, "no es difícil saber cuántas peonadas pueden ser para una vendimia, por ejemplo", paso tras el que se podrían identificar cuántos contratos se han suscrito para comprobar que se ajustan a las necesidades.
"El empresario que haga las cosas bien no tendrá ningún miedo a que la administración le haga una estimación de la mano de obra que necesita", ha abundado.
Aunque reconoce que es algo que "puede sonar mal", ha insistido en que este sistema puede ser útil incluso para detectar quién cobra ayudas de la PAC sin realmente trabajar en el campo.
Para De la Rosa, este sistema serviría para "poder considerar el campo como una actividad tan digna como cualquier otra".
