El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha remitido una carta al portavoz socialista en las Cortes, José Luis Martínez Guijarro, en la que le informa de los datos que ha solicitado y le ofrece de nuevo colaboración para trabajar de forma conjunta en los presupuestos para 2014.
Fuentes de la Consejería de Hacienda informaron del envío de esta carta en respuesta a la que el portavoz socialista remitió al consejero el pasado 26 de agosto en la que le pedía información sobre los ingresos previstos por la Junta para 2014.
El consejero envió su respuesta en "un ejercicio de transparencia sin precedentes en el diálogo entre grupos, por deseo expreso de la presidenta, María Dolores Cospedal", indicaron las fuentes.
En ella, según la Consejería, se le informa de los datos pedidos y de otros que no solicitó "pero que son igualmente determinantes para la concreción de los recursos disponibles para políticas de gasto".
En concreto, ha mencionado el descenso de 166 millones de euros en las entregas a cuenta del sistema de financiación autonómica, que en su opinión "son muestra del nefasto sistema que rige y no de las políticas llevadas a cabo en España y en Castilla-La Mancha".
El consejero de Hacienda señaló que dicho sistema, aprobado en el año 2009, "resulta del todo perjudicial para los intereses de nuestra región y por ello, en la elaboración de nuestros presupuestos sufrimos las consecuencias de un sistema malo para Castilla-La Mancha".
Otro de los elementos importantes que "lastra" de manera significativa los presupuestos regionales son los intereses de la deuda, pues, según recordó el consejero, "Castilla-La Mancha cuenta con una de las deudas más elevadas de España, lo que supone un gasto por intereses excesivo y que no se puede destinar a otra cosa".
Por último, incidió en que los errores del sistema de financiación autonómica provocaron que en 2008 y 2009 se entregasen por el Estado cantidades a cuenta del sistema muy superiores a las que correspondían, que fueron gastadas en los presupuestos de esos años, y que han dado lugar a liquidaciones negativas que ahora hay que devolver por importe de 1.298 millones de euros.
Según las fuentes consultadas, el consejero destacó que, "a pesar de todos los obstáculos y las consecuencias de la nefasta gestión presupuestaria seguida por el anterior gobierno socialista", basada en déficit reiterados y elevados, y por tanto sostenida por incrementos de deuda, "hemos podido salir adelante".
