La inversión es una de las grandes olvidadas en las finanzas personales. Sin embargo, es uno de los pilares clave del ahorro. Supone destinar una parte de nuestro dinero a la gestión externa para obtener beneficios o dividendos en el futuro. En otras palabras, es poner a trabajar el dinero.
Tomar la decisión de invertir suele generar dudas. Estar bien informado y tener una buena educación financiera son elementos clave para dar el primer paso.
Invertir suele ser más emoción que razón
Dejarse llevar por corazonadas e información incompleta, o querer imitar lo que hacen otros, esperando obtener sus mismos resultados, suele ser uno de los errores más comunes. Pocas veces se toman decisiones previamente estudiadas y basadas en datos reales y objetivos. Por si esto fuera poco, una vez que el dinero está invertido, la ansiedad y la impaciencia pueden jugar malas pasadas.
En España, cerca del 90% de las personas que invierte en los mercados de valores por su cuenta y sin conocimientos previos, termina perdiendo dinero. Así lo expuso el analista de mercados en IG Sergio Ávila en el primer foro de Oportunidades para inversores activos.
Por ello, es tan importante documentarse y hacer una investigación cuidadosa de las condiciones del mercado, sin dejarse llevar por razones poco fundadas. Pero no todo el mundo puede permitirse esta preparación ni el tiempo necesario y es aquí cuando conviene evaluar otras opciones.
Gestores automatizados de inversión
Existen sistemas automatizados conocidos como Roboadvisors, que se encargan de gestionar carteras de inversión en función de algoritmos y con el apoyo de especialistas. Para invertir con estos Roboadvisors es necesario responder un cuestionario online con el que se establece el perfil de riesgo y se determina la distribución de activos que mejor se adapte al inversor.
La inversión mínima con estos sistemas suele ser menor que con los asesores financieros tradicionales. Una vez que la persona ha realizado el depósito, el dinero se pone a trabajar sin necesidad de que el cliente tenga que tomar decisiones.
Es una herramienta pensada para medio y largo plazo donde los instrumentos de inversión más comunes son los fondos indexados. Esto permite diversificar la cartera de manera más eficiente. En el camino se pueden reinvertir dividendos o vender activos en pérdida para adecuarse a la gestión de riesgo, todo de manera automatizada.
Ventajas de invertir con Roboadvisors
Invertir a través de sistemas automáticos puede ser una buena opción, especialmente para personas que se inician en el mundo de las inversiones, que no tienen muchos conocimientos o que no cuentan con el tiempo suficiente para gestionar su cartera.
Algunas de las ventajas más notables de los Roboadvisors son las siguientes:
Gestión automática y objetiva
Las operaciones se realizan de forma automática, limitando al máximo el factor humano. Así se tiene la certeza de que las decisiones son objetivas y no se ven influenciadas por emociones o juicios de valor.
Comisiones atractivas
El coste y las comisiones de los Roboadvisors son menores. Puede ser hasta un tercio más barato que los asesores tradicionales, dado su estrategia de gestión pasiva. A la larga y con la ayuda del interés compuesto, esto puede traducirse en una mayor rentabilidad.
Ahorro de tiempo
No hay que estar pendiente del mercado constantemente para tomar decisiones sobre la cartera de activos, porque lo hacen por ti.
Accesibilidad
No es necesario contar con un gran capital inicial. A partir de 500 € es posible comenzar a invertir y se pueden hacer nuevas aportaciones o programarlas de manera periódica. Además, la posibilidad de disponer del dinero en cualquier momento sin costes adicionales por la cancelación del servicio resulta muy interesante para los usuarios.
Seguimiento y proyección
Se tiene la opción de revisar la evolución de la inversión y evaluar los beneficios. También se pueden establecer objetivos y hacer proyecciones de las rentabilidades esperadas a futuro.
Sin lugar a dudas, invertir es tan acertado como necesario, pero muchas veces se puede complicar por desinformación o impulsividad. Hacerlo con Roboadvisors es una alternativa que disminuye el tiempo que se le dedica, las preocupaciones y la incertidumbre mientras el dinero trabaja en piloto automático.
Toda inversión conlleva riesgos, incluido ausencia de rentabilidad y/o pérdida del principal invertido. El valor de la inversión está sujeto a fluctuaciones del mercado, sin que rentabilidades pasadas generen derechos en el futuro.
