Absorbente en derrames de petróleo, material aislante en bioconstrucción, biofertilizante agrario o su uso como fibra textil son algunas de las múltiples aplicaciones entre tradicionales y novedosas que proporciona la lana: una materia prima natural y ecológica que es renovable, reutilizable y cien por cien biodegradable.
Este sábado se conmemora el II Día Europeo de la Lana, organizado este año por España y promovido por la Fundación European Wool Exchange (EWE), que está formada por entidades del continente las cuales tienen en común dar valor a la lana europea, explica a Efe la coordinadora de proyectos de la asociación Trashumancia y Naturaleza, Concha Salguero.
Para esta edición, España ha organizado un encuentro virtual con la participación de entidades dedicadas a la innovación textil y artesanía, tejedoras, ganaderías y otras organizaciones que apuestan por la revalorización de la lana, evento que se completará con actividades en varios países bajo el lema “Bienestar, educación y arte” para hacer hincapié en su uso en la artesanía textil como fibra natural de gran valor social y ambiental.
Todos los países comparten un mismo problema: poseen la lana, que se considera un residuo, y “no saben qué hacer con ella”, a pesar de las numerosas utilidades que tiene, y además “importamos lana, que a veces se lleva desde aquí, de China y Australia, ya transformada con la cantidad de emisiones que eso conlleva”.
Según Salguero, si realmente queremos cambiar nuestra economía para que sea sostenible y que cierre ciclos, resulta “muy importante” dar visibilidad a la lana europea, ya que sería un suplemento de renta para nuestros ganaderos y ganaderas, que se encuentran en una situación “muy alarmante”, sobre todo por la competencia de la ganadería industrial y la “falta de apoyo” por parte de las políticas agrarias.
Por ello, el II Día Europeo de la Lana busca concienciar a la sociedad sobre el problema que existe en torno a esta materia prima, al mismo tiempo que pretende reivindicar las múltiples soluciones que tenemos al alcance de nuestra mano.
Pero, ¿cuáles son los principales usos entre tradicionales y novedosos de la lana?
1. ÁMBITO TEXTIL
La aplicación de la lana en el ámbito textil se sitúa como uno de sus usos tradicionales y, por ejemplo, en España las vías pecuarias surgen precisamente porque esta materia prima era un material muy valioso comparable al “petróleo de la época”, que daba muchos ingresos a la corona.
En la actualidad, el porcentaje de lana que se emplea en el sector textil es pequeño, pero de nuevo está experimentando un repunte debido a la predisposición de la sociedad a usar fibras más naturales.
2. INDUSTRIA DEL MUEBLE
Esta materia prima es muy utilizada en tapicerías de sillones, sillas o sofás y también para alfombras. La lana merina española es “muy buena” para las alfombras porque tiene mucho ‘muelle’, ya que es un poco más gruesa que la que suelen vender australianos y neozelandeses y se recupera muy bien. Cuando pisas, vuelve a su estado habitual y no se queda aplastada.
3. BIOCONSTRUCCIÓN
La lana, al ser un gran aislante, tanto de sonido como de temperatura, también es empleada en bioconstrucción, un sector en el que tiene gran proyección de futuro.
Además, se utiliza como base de firmes en caminos. Un ejemplo es su uso en zonas protegidas de Escocia, donde, en lugar de poner la habitual malla plástica para construir los caminos, se utiliza una capa de lana, una medida que está bastante regularizada.
4. BIOFERTILIZANTE
Esta materia prima, al tener sustancias que poseen los fertilizantes, también se puede usar en el suelo como nutriente. El fertilizante sintético tiene unos impactos negativos tanto al utilizarlo como al producirlo, que se evitarían con la lana porque es natural.
5. ABSORBENTE PARA DERRAMES DE PETRÓLEO
Cuando se produce una mancha de petróleo, la lana posee la capacidad de absorber el líquido. El petróleo flota en el agua y, al poner la lana, se extrae la mancha provocada por esta sustancia.
6. BASE DE BIOPLÁSTICO
La lana contiene queratina que se puede emplear como una base para la producción de bioplástico con poco impacto.
