Fiscalía Anticorrupción pide imputar al BBVA como persona jurídica en el caso Villarejo

El presidente de la entidad, Carlos Torres, crea un blog para comunicarse con su plantilla y los insta a "evitar prejuzgar hechos no constatados”

Fiscalía Anticorrupción pide imputar al BBVA como persona jurídica en el caso Villarejo
photo_camera Fiscalía Anticorrupción pide imputar al BBVA como persona jurídica en el caso Villarejo

La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado al juez que impute al BBVA por cohecho, revelación de secretos y corrupción en los negocios por los pagos "ilícitos" que hizo al excomisario José Villarejo y que afectaron a "varias áreas sensibles del banco y a diversos ejecutivos" durante "un prolongado período".

Los fiscales del caso Tándem han presentado este miércoles al juez Manuel García Castellón un informe pidiendo que se investigue al BBVA como persona jurídica, en el que indican de que uno de los directivos del banco cobró "dádivas" del excomisario por conseguirle contratos con el banco.

En el informe también rechazan la petición del banco de personarse como parte perjudicada y detallan las razones por las que quieren investigar al banco por "múltiples" de esos tres delitos.

Uno de ellos, el de corrupción en los negocios, responde a las supuestos regalos o comisiones que, según fuentes fiscales, pudo cobrar uno de los directivos del BBVA imputado en la causa a cambio de facilitar los contratos con el Grupo Cenyt, propiedad de Villarejo.

La Fiscalía indica que esos contratos a Cenyt, que se extendieron de 2004 a 2017, afectaron a áreas sensibles de la entidad y a varios de sus ejecutivos, y se produjeron cuando Villarejo estaba aún en activo en la Policía Nacional.

Es precisamente por su condición de policía por lo que el banco no podía contratarle para labores de espionaje como las que encargó al excomisario en 2004 ante una OPA hostil de Sacyr.

De esa incompatibilidad para ser policía y espía a la vez nace la petición de imputación por el delito de cohecho activo, puesto que, dice Anticorrupción, las contrataciones tuvieron como objeto "servicios de inteligencia y de investigación de naturaleza patrimonial y carácter ilícito".

Y es que Villarejo pudo acceder a "seguimientos personales", a las "comunicaciones" y a "documentación bancaria" de los espiados gracias a sus contactos en la Policía como miembro del cuerpo.

Esto supone "una reiterada injerencia en los derechos fundamentales de las personas" y por ello la Fiscalía imputa al banco delitos de descubrimiento y revelación de secretos.

Tras conocerse la noticia, el BBVA ha afirmado que ha aportado al juez "hallazgos relevantes" sobre el espionaje que encargó a Villarejo y ha reiterado su compromiso con la ley.

Su presidente, Carlos Torres Vila, asegura en un comunicado que continuará "colaborando activamente con la justicia" para esclarecer los hechos.

De hecho, la petición de hoy de Fiscalía se ha producido después de analizar la documentación en papel y digital incautada en los registros de noviembre de 2017 de la operación Tándem, así como los documentos aportados por el propio BBVA, entidad que, en caso de ser imputada, deberá designar a una persona que la represente.

El movimiento del ministerio fiscal se produce después de que este mes comparecieran como investigados una decena de cargos actuales y pasados de la entidad, entre ellos el exconsejero delegado Ángel Cano y el exjefe de seguridad Julio Corrochano, que pagó una fianza de 300.000 euros para no entrar en prisión.

Casi todos ellos se acogieron a su derecho a no declarar por estar secreta la causa y el juez tiene previsto citarles de nuevo cuando levante el secreto de estas diligencias, según informaron a Efe fuentes jurídicas.

Las fuentes consultadas señalaron que la mayor parte de los investigados manifestaron su interés en colaborar con la justicia en el momento en que se levante el secreto de esta pieza, la número 9 del llamado caso Tándem.

En esa ronda declaraciones, el juez y los fiscales del caso se desplazaron a la prisión de Estremera (Madrid) para interrogar a Villarejo, que confirmó la existencia de contratos con el BBVA, pero negó que fueran para realizar "ningún tipo de espionaje". En el caso de la OPA hostil de Sacyr en 2004, afirmó que se trató de un acto defensivo del banco. 

Comentarios