El ERE de Telefónica afecta al 72% de la plantilla en Albacete y Cuenca y al 45% en Toledo
El acuerdo para los siete ERE planteados por la dirección del Grupo Telefónica quedó rubricado este lunes y afectará de manera destacada a Castilla-La Mancha, una de las regiones con plantillas más envejecidas. Los despidos se dirigirán mayoritariamente a trabajadores nacidos entre 1969 y 1971 y se ejecutarán de forma escalonada durante los próximos tres años, hasta 2028.
En el conjunto de España, el proceso implicará al menos 4.525 salidas, catorce menos de las previstas inicialmente, tras una reducción de última hora en la afectación de Telefónica Global Solutions, Telefónica Innovación Digital y Telefónica S.A., las sociedades conocidas como GBU. En un primer planteamiento, la compañía llegó a proponer hasta 6.088 salidas, por lo que la cifra final supone una rebaja del 25,67%.
Según explicó Miguel Ángel Gracia, responsable de la sección sindical de Telefónica en Castilla-La Mancha, la afectación media en la región se situará en torno al 60%, algo inferior a lo previsto en fases anteriores de la negociación, aunque con importantes diferencias por provincias. En concreto, el ERE afectará al 72% de la plantilla en Albacete, al 72% en Cuenca, al 63% en Ciudad Real, al 52% en Guadalajara y al 45% en Toledo, debido al distinto perfil de edad de los centros de trabajo.
El acuerdo contempla, además, la prórroga de los convenios colectivos hasta 2030, una condición que el sindicato con mayoría en la mesa de negociación vinculó de forma expresa a la firma del ERE, con el objetivo de blindar las condiciones laborales tras la presentación del plan estratégico del grupo a comienzos del pasado mes de noviembre. Desde UGT se considera que la negociación ha permitido alcanzar los objetivos marcados y, por ello, se procedió a la firma del acuerdo.
Calendario y distribución de las salidas
El proceso de adhesión voluntaria comenzará el 29 de diciembre para las filiales amparadas en el Convenio de Empresas Vinculadas (CEV) —Telefónica de España, Telefónica Móviles y Telefónica Soluciones— y se prolongará hasta el 26 de enero. En el caso de las GBU, el plazo se abrirá el mismo día, pero se extenderá hasta el 29 de enero, mientras que en Movistar+ el periodo se iniciará el 7 de enero y concluirá el 6 de febrero.
En las filiales del CEV, la afectación mínima se reparte en 2.925 personas en Telefónica de España (casi el 33% de la plantilla), 720 en Telefónica Móviles (el 20%) y 120 en Telefónica Soluciones (cerca del 11%), lo que suma 3.765 bajas. La oferta final establece una horquilla de entre 3.765 y 5.040 salidas, en función del volumen de adhesiones voluntarias que se registre y que se conocerá en febrero.
En las GBU, la modificación de última hora reduce la afectación a 585 salidas, un 23% menos que en el planteamiento inicial. De ellas, 109 corresponden a Telefónica Global Solutions, 182 a Telefónica Innovación Digital y 294 a Telefónica S.A. A estas cifras se añaden 175 bajas en Movistar+, un 20,3% de su plantilla, muy por debajo del casi 35% planteado al inicio de la negociación.
En conjunto, las 4.525 salidas mínimas suponen que Telefónica reducirá alrededor de un 26% su plantilla en las siete filiales afectadas, que suman actualmente 17.248 trabajadores, nueve puntos porcentuales menos que el 35% que se barajó en un primer momento.
Indemnizaciones y condiciones
Las condiciones económicas del ERE contemplan distintos tramos en función del año de nacimiento. Para los trabajadores nacidos entre 1969 y 1971, se establece una renta del 68% del salario regulador hasta los 63 años y del 38% a partir de entonces, con la salvedad de que en Movistar+ no se incluyen los nacidos en 1971. Para los nacidos entre 1965 y 1968, los porcentajes serán del 62% hasta los 63 años y del 34% posteriormente, mientras que para los nacidos en 1964 y anteriores se fijan en el 52% hasta los 63 años y el 35% a partir de esa edad.
Para adherirse de forma voluntaria al ERE, se exige una antigüedad mínima de 15 años en las filiales del CEV durante la vigencia del proceso, que podrá extenderse hasta el 31 de diciembre de 2028. En el caso de las GBU, el requisito baja a 13 años de antigüedad y el procedimiento tendrá una duración máxima hasta el 31 de diciembre de 2026. Estas sociedades incorporan, además, primas de voluntariedad que oscilan entre los 5.000 y los 18.000 euros en función de la antigüedad.
Coste y ahorro para la compañía
La compañía ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que el coste del ERE ascenderá a unos 2.500 millones de euros, antes de impuestos, con una provisión de alrededor de 2.300 millones para Telefónica España y Movistar+ y de unos 200 millones para las GBU. De cumplirse las estimaciones de salidas, el coste medio por trabajador se situará en torno a los 455.000 euros, casi un 20% más que en el ERE cerrado en enero de 2024.
Pese a ello, Telefónica calcula que el impacto en la generación de caja será positivo desde 2026 y que el ahorro anual promedio alcanzará cerca de 600 millones de euros a partir de 2028, más del doble de los 285 millones anuales del proceso anterior. Este ERE se enmarca en el plan estratégico presentado en noviembre, que prevé ahorros de costes de 3.000 millones de euros para 2030, de los cuales 1.200 millones procederán de este proceso.