CSIF reclama al nuevo Gobierno de CLM un compromiso efectivo con los empleados públicos

La organización sindical ha exigido, una vez más, la derogación de la denominada como 'ley Cospedal' del año 2012, por considerar que este ordenamiento jurídico sitúa a la región "en el furgón de cola" de todo el territorio nacional

El presidente de CSIF en Castilla-La Mancha, Julio Retamosa, en un momento de la entrevista - EFE/ismael Herrero
photo_camera El presidente de CSIF en Castilla-La Mancha, Julio Retamosa, en una imagen de archivo - EFE/ismael Herrero

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha reclamado al nuevo Gobierno de Castilla-La Mancha un compromiso "efectivo" con los empleados públicos de la región, con motivo de la toma de posesión este lunes de los consejeros.

En nota de prensa, la organización sindical ha exigido, una vez más, la derogación de la denominada como 'ley Cospedal' del año 2012, por considerar que este ordenamiento jurídico sitúa a la región "en el furgón de cola" de todo el territorio nacional.

En este sentido, ha señalado que dicha normativa mantiene la penalización económica por incapacidad temporal, la paralización de la carrera profesional y la no sustitución de trabajadores desde el primer día en el ámbito sanitario, así como la reducción del horario lectivo y la ratio de alumnos en el ámbito educativo, entre otros recortes.

Además, CSIF ha indicado que la Administración autonómica "no debería dilatar por más tiempo" la aplicación de la subida salarial del 0,25 por ciento a los empleados públicos aprobada por el Consejo de Ministros el pasado 21 de junio.

De igual forma, ha considerado que en lugar de proceder a la concesión de subvenciones "directas y graciables" a organizaciones "afines" tales como CCOO, UGT y Cecam -que han recibido más de 18 millones de euros desde 2014-, ese dinero se podría haber destinado a implementar no sólo esta subida salarial para empleados públicos sino también para "poner fin a todos los recortes efectuados".

CSIF ha recordado que ha vuelto a situarse como el primer sindicato en el conjunto de las administraciones públicas en Castilla-La Mancha tras los procesos electorales que finalizaron en junio, posición que le permite afrontar con garantías la recuperación de derechos y mejora de las condiciones laborales de los empleados públicos de la región. 

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