"Salario o conflicto" es el eslogan lanzado por los sindicatos CCOO y UGT para captar la atención de los más de 30.000 trabajadores del sector del calzado llamados mañana, jueves, a una huelga cuyo propósito es que la patronal acceda a un aumento de salarios que evite la pérdida de poder adquisitivo.
Las patronales del sector, Fice y AEC, propusieron en la última reunión con los sindicatos unas subidas salariales del 8 % a partir de enero de 2023 y un compromiso de incremento para los próximos cuatro años con una revisión al IPC real topada al 2,5 %.
Estas propuestas fueron rechazadas por la parte sindical por considerarlas "insuficientes". Además, exigen un convenio para tres años, que según UGT "lleva estancado hace meses", así como una cláusula que garantice el poder adquisitivo de los trabajadores.
La Federación de Industrias del Calzado en España (Fice) y la Asociación Española de Empresas de Componentes y Maquinaria para el Calzado y la Marroquinería (AEC) pusieron encima de la mesa un incremento salarial total que alcanzase entre el 12,5 % y el 15 % durante los próximos cuatro años, en función del comportamiento de la inflación.
Pero las centrales sindicales, que solicitan también una reducción de jornada en 12 horas, complementar a partir del cuarto mes la incapacidad temporal, subir el plus de distancia o una regulación del contrato fijo discontinuo, se levantaron de la mesa de negociación para convocar la primera huelga en el sector desde el siglo pasado, en la década de los 70.
El portavoz de la representación empresarial en la negociación, José María Escrigas, señala en un comunicado que los representantes de los sindicatos "sin criterio alguno han incrementado su última propuesta demostrando una manifiesta voluntad de no valorar nuestra oferta ni de negociar".
CCOO recuerda que el calzado se concentra, fundamentalmente, en la localidad riojana de Arnedo, en los municipios castellano-manchegos de Fuensalida (Toledo) y Almansa (Albacete) y en la provincia de Alicante, en Elda y Elche fundamentalmente.
El sindicato enumera como las principales empresas de la industria del calzado a Arneplant, Fluchos, Callahan, Moron, Fal y Pitillos en La Rioja; Pablosky, Baerchi, Joma, Legar, Hergilza y Eladio Martín en Fuensalida; Creaciones SW, Pedro García, Magrit, Manufacturas Newman, Panama Jack, Pikolinos y Mustang en Alicante y SBA Factory, Sendra, Pertini, Martinos Forma, Lorens y Milan Classic en Almansa.
