Castilla-La Mancha, la segunda comunidad con menor cobertura de fibra óptica

Castilla-La Mancha es la segunda comunidad autónoma con menor porcentaje de hogares cubiertos con fibra óptica, con un 35 %, mientras que las provincias de Cuenca y Toledo están entre las que tienen menos hogares con cobertura.

Así se recoge en el último informe de cobertura de banda ancha a mediados de 2016 del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, que indica que Extremadura, con un 33,4 %, es la única comunidad autónoma que tiene más porcentaje de hogares sin cobertura de fibra óptica que Castilla-La Mancha.

Por provincias, Cuenca es la tercera con menor porcentaje de fibra óptica, que solo llega al 26,19 % de los hogares conquenses, mientras que Toledo es la cuarta con menos cobertura de fibra óptica, con un porcentaje del 29,11 %.

Tienen menos cobertura que Cuenca las provincias de Lugo (24,67 %) y Teruel (25,31 %), mientras que la quinta provincia con menor porcentaje es la de Huesca (29, 75 %).

La provincia de Castilla-La Mancha que tiene una mayor cobertura de fibra óptica es la de Albacete, en la que llega al 47,46 % de los hogares, seguida de la de Guadalajara (41,38 %) y de la de Ciudad Real (33,76 %).

Más de 11,3 millones de hogares españoles, el 62,8 % del total, están cubiertos con fibra óptica, pero la situación es muy dispar por comunidades autónomas: mientras en Melilla la cobertura es del 100 % y en Madrid del 94,26 %, en Extremadura y Castilla-La Mancha cae al 33,4 % y el 35 %.

Así se recoge en el último informe de cobertura de banda ancha a mediados de 2016 del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital, ponen también de manifiesto la brecha en cuanto a cobertura de fibra entre zonas urbanas y rurales, dado que el porcentaje de cobertura rural de esta tecnología no llega el 10 % (9,7 %).

De los 8.117 municipios españoles, 6.682 son considerados rurales, es decir, con una densidad de población inferior a 100 habitantes por kilómetros cuadrado.

El informe revela las grandes diferencias que se dan entre los municipios si se tiene en cuenta su población: si en los de más de 100.000 habitantes la cobertura de fibra supera el 91 % y llega hasta el 98,4 % en los de más de medio millón de habitantes, en los más pequeños cae en picado hasta llegar al 0,5 % en los de 101 a 500 habitantes y al 2,3 % en los de 1.001 a 2.000 habitantes.

En los menores de 100 habitantes, la cobertura, según el estudio, es inexistente.

La fibra óptica hasta el hogar (FTTH), por cuyo despliegue han apostado la mayoría de los operadores, es la tecnología de transmisión de mayor crecimiento en España, según el estudio, que revela que sólo en la segunda mitad del año 2016 se ha producido un incremento de aproximadamente siete puntos porcentuales con respecto a principios de año.

Estas redes permiten ofrecer velocidades de descarga muy superiores a las redes convencionales, superiores incluso a los 100 Mbps, además de permitir una mayor simetría, es decir valores más parecidos para las velocidades de subida y de descarga de datos.

Pero este crecimiento en las redes de fibra, que se ha visto también acompañado por un aumento del número de clientes de esta tecnología (casi 4 millones, según los últimos datos de la CNMC) no ha arrojado un mapa homogéneo de cobertura.

Por debajo de la media se sitúan Aragón, con una cobertura de fibra del 62,6 %; Navarra (57,7 %), Canarias (57,5 %), Comunidad Valenciana (56,8 %), Andalucía (51,3 %), Castilla y León (49,9 %), Cantabria (46,9 %), Murcia (45,9 %), Galicia (36,3 %), Castilla-La Mancha (35 %) y Extremadura (33,4 %).

Estas disparidades se repiten a nivel provincial, toda vez que la cobertura de Madrid (94,26 %) o Barcelona (90,37 %) contrasta con la de Lugo (24,67 %), Teruel (25,31 %), Cuenca (26,19 %), Toledo (29,11 %) y Huesca (29,75 %), las provincias peor cubiertas con esta tecnología.

Los datos provinciales también revelan las brechas en cobertura de fibra existentes dentro de las propias comunidades autónomas.

Comentarios