Caja Rural Castilla-La Mancha ha cerrado 2016 con unos activos que superan los 7.100 millones de euros, por lo que la entidad se mantiene como la primera caja rural de la región y la tercera de España.
El presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha, Javier López Martín, y el director general de la entidad, Víctor Manuel Martín, han expuesto en rueda de prensa los principales resultados de la caja relativos a 2016, unos datos que demuestran que la entidad "ha crecido en clientes, en activo y en pasivo".
López Martín, que presenta por primera vez los resultados de la entidad tras haber sucedido en el cargo a Andrés Gómez Mora a lo largo del último ejercicio, ha destacado que los datos reflejan la solvencia y la solidez de la caja y ha agradecido a los mil trabajadores de la caja su compromiso con la misma.
Martín López ha sido el encargado de desgranar las principales cifras de resultados de la caja, que cerró 2016 con unos beneficios brutos de 25,4 millones de euros, fruto de "la prudente y eficiente gestión" realizada, mientras que en neto, los beneficios han sido de 21,9 millones de euros, que son un 2,32 por ciento más que en 2015 después del proceso de homogeneización de las cuentas de resultados del ejercicio 2015 y 2016.
"Crecer en márgenes es casi un milagro y Caja Rural lo ha hecho", ha destacado, pues si bien ha admitido que la entidad ha tenido un "beneficio muy contenido y podía haber dado muchos más beneficios", ha subrayado que lo importante es que han crecido las reservas de fondos "por lo que pueda pasar".
En cuanto a la cuenta de resultados, el director general de Caja Rural Castilla-La Mancha ha indicado que el margen bruto alcanzó los 111,9 millones, que supone un 7,42 por ciento más que en 2015, mientras que el margen neto fue de 44,3 millones de euros, es decir, un 16,16 por ciento más que el ejercicio anterior.
Todo ello, ha reivindicado Martín López, en un año con tipos de interés negativos del -0,11 por ciento, "un negocio cada vez más agresivo, con la competencia más armada" y una situación política "un tanto anormal".
"Son unos resultados sólidos, que vienen a fortalecer si cabe aún más la solvencia de la entidad y se basan en un concepto clave, la prudencia", ha destacado Martín López, que ha valorado que "la caja va a hacia arriba, sin prisa pero sin pausa".
Y para abundar en estos argumentos, ha expuesto que el margen bruto experimentó una evolución positiva del 7,42 por ciento hasta los 111,9 millones de euros, mientras que el margen neto alcanzó los 44,3 millones de euros, es decir, una subida del 16,16 por ciento.
"Son márgenes contundentísimos", ha valorado el director general de Caja Rural Castilla-La Mancha, que también ha destacado que el ratio de morosidad es del 3,16 por ciento, frente al 9,11 por ciento de la media del sector financiero, por lo que ha comentado que ese ratio de la entidad financiera castellano-manchega "es casi una morosidad estructural, difícil de bajar".
Además, el ratio de cobertura de fondos alcanza el 100,8 por ciento sobre el saldo dudoso, mientras que la media del sector es del 56 por ciento, lo que demuestra que Caja Rural "sigue echando paladas de dinero a las reservas para dar cobertura a situaciones inesperadas".
Caja Rural Castilla-La Mancha ha cerrado 2016 con 75.000 socios y 33.525 nuevos clientes, por lo que el total de clientes de la entidad supera los 400.000 y se han gestionado recursos de estos clientes hasta los 5.006 millones de euros, un 4,42 por ciento más que el año anterior.
Asimismo, la caja ha concedido en el último año 877 millones en créditos en un total de 15.304 inversiones, lo que supone un incremento del 9,8 por ciento en la cantidad económica y un 10,83 por ciento en el número de inversiones, de forma que la inversión crediticia bruta al cierre del ejercicio era de 3.189 millones.
Caja Rural también concedió 842 millones de euros de créditos a las empresas de la región, lo que a juicio de Martín López refleja el compromiso de la entidad con el sector empresarial de su zona de influencia, que se fija en Castilla-La Mancha, Madrid y Ávila.
De cara a 2017, ha indicado que Caja Rural Castilla-La Mancha "va a trabajar como siempre, con dignidad, honradez, humildad, volcados en los clientes, en la región y en los sectores que más lo necesitan".
NINGUNA PREOCUPACIÓN POR LAS CLÁUSULAS SUELO
En otro orden de asuntos, Caja Rural de Castilla-La Mancha ha aseverado que no tiene "ninguna preocupación" ante la devolución de las cláusulas suelo, pues ha subrayado que la entidad "tiene dotaciones específicas para este capítulo".
El director general de la entidad ha comentado así durante la rueda de prensa la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE, que dictaminó a favor de establecer una retroactividad total en la devolución de las cláusulas suelo que se aplicaron sin transparencia.
Martín López ha explicado que la caja no tiene "ninguna preocupación", pues tiene "dotaciones específicas para este capítulo si hiciera falta" y, además, no tiene "una conflictividad elevada en este sentido".
De hecho, ha valorado que la caja vendió sus cláusulas suelo "con total transparencia" y ha defendido que "se hizo una buena venta", pues se vendieron "con total legitimidad a los clientes".
En cualquier caso, ha señalado que si la justicia dicta una sentencia en contra de la caja la aceptará "como lo ha hecho siempre", aunque ha señalado que la entidad no emitió muchas cláusulas suelo.
Por todo ello, ha incidido en que la caja afronta esta situación "con total normalidad" y la devolución de las cláusulas suelo no tendrá "ninguna repercusión en los resultados de 2017".
