El número de accidentes laborales durante el primer trimestre de 2020 en Castilla-La Mancha ha caído un 20,5 % con respecto al mismo período del año anterior, así como el índice de incidencia, que lo ha hecho en un 19,4 por ciento.
Así lo ha analizado este martes la Comisión Regional de Seguridad y Salud Laboral de Castilla-La Mancha, que se ha reunido por videoconferencia para evaluar la evolución de los datos de siniestralidad laboral en relación al número de accidentes con baja laboral y el índice de incidencia -que relaciona accidentes con población protegida con contingencias profesionales-, según ha informado la Consejería de Economía, Empresas y Empleo en una nota.
La Comisión ha abordado la influencia de la paralización de la actividad como consecuencia de la declaración del estado de alarma con motivo de la pandemia de la COVID-19 en la segunda quincena del mes de marzo, aunque ha resaltado que con anterioridad el índice de incidencia de accidentes laborales había experimentado un descenso del 11 por ciento.
Durante el encuentro, la viceconsejera de Empleo, Diálogo Social y Bienestar Laboral, Nuria Chust, ha detallado que, durante el primer trimestre, el número total de accidentes de trabajo con baja ha sido de 5.716 y se han contabilizado 11 accidentes mortales, cuatro de ellos en accidentes de tráfico y tres por patologías no traumáticas.
En cuanto al índice de incidencia, Chust ha concretado que en el colectivo de trabajadores asalariados se ha reducido un 19,9 %, mientras que en el de autónomos ha caído un 11,9 por ciento con respecto a 2019.
Por otro lado, la Comisión ha analizado el impacto de la declaración del estado de alarma en la actividad económica, tanto por la suspensión y ralentización de determinadas actividades como, en sentido contrario, la incidencia en los denominados servicios esenciales, así como el fuerte incremento de la modalidad de teletrabajo, con el consiguiente efecto en la movilidad.
De otra parte, el director territorial de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, Juan Díaz Rokiski, ha informado de las actuaciones de inspección a lo largo del inicio de 2020, que se han reducido respecto a lo previsto, en particular a partir de la segunda quincena del mes de marzo.
La actuación inspectora se ha dirigido, sobre todo, a la intervención en situaciones derivadas de la emergencia sanitaria en el entorno laboral y en el marco de coordinación y asistencia a la autoridad sanitaria.
