La Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural ha abonado más de 4,7 millones de euros, correspondientes a la anualidad 2020 de los Fondos Operativos, a un total de diez Organizaciones de Productores del sector de Frutas y Hortalizas (OPFH), que agrupan a 1.068 socios para acciones relacionadas con la planificación de la producción, la mejora de calidad de los productos, investigación y mejora de la comercialización.
El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha destacado la importancia de que las cooperativas agroalimentarias y las empresas del sector se unan para “ser más fuertes”, pues gracias a las integraciones comerciales se puede concentrar la oferta y ser más competitivos en el mercado, informa la consejería en nota de prensa.
Las agrupaciones más grandes tienen mayor capacidad de negociación dentro de la cadena alimentaria, pueden comercializar mejor y “defender mejor los intereses de los agricultores, haciendo más rentables las explotaciones”, ha apuntado Martínez Arroyo, algo que es fundamental para el “futuro sostenible” del sector agroalimentario en Castilla-La Mancha.
Las Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas son entidades reconocidas que unen a cooperativas y empresas para realizar, de manera conjunta, la transformación del producto, la distribución, el envasado, el etiquetado, la promoción, el control de calidad, la adquisición de materias primas, o el uso de instalaciones de almacenamiento.
Entre las ventajas de pertenecer a una de estas organizaciones está no solo concentrar la oferta, sino poder planificar la producción y adaptarla a la demanda; optimizar los costes de producción; mejorar la comercialización de las producciones; y lograr productos con mayor calidad y sostenibilidad, además, gracias al reconocimiento como OPFH se puede acceder a las ayudas de los programas operativos del sector de las frutas y hortalizas.
Además, Martínez Arroyo ha incidido que en la nueva PAC “está garantizada la continuidad” de los programas sectoriales de frutas y hortalizas, vino y apicultura, este último, con un incremento a través de fondos extraordinarios, y a estos tres podría unirse el del olivar, para lo cual se ha propuesto ya la aplicación de un programa específico para el aceite de oliva.
