El piloto puertollanero Antonio Valero ha ofrecido su triunfo de campeón Intercontinental, modalidad 'Lite Class', tras seis duras jornadas subido a su nueva KTM 450, al ayuntamiento de Argamasilla de Calatrava, localidad donde reside.
Valero, que ha reiterado su agradecimiento por el "apoyo" que le han dispensado desde el Consistorio, ha relatado que, pese a que este año cubría la competición de media carrera, "ha sido más duro que el año pasado", sobre todo en las primeras etapas, ha señalado una nota municipal.
Y ha reseñado, el frío, que se tradujo en nieve inédita en varios puntos del itinerario, y el temprano inicio de la salida, "de noche, incluso, acabando al atardecer y con etapas mucho más largas".
A ello ha añadido "el error de cálculo" que cometió durante el primer día, en la especial matinal, al no poner el combustible suficiente para llegar al destino con sus propios medios.
"Tuve que permanecer parado media hora hasta que llegó un piloto que me ayudo, primero intentando trasvasar gasolina de su depósito y, ante el intento baldío, optando por remolcarme hasta la meta y con el hilillo de combustible que me quedaba pude cruzarla con el motor en marcha, lo que evitó mi descalificación", ha explicado.
Si esa tarde recuperó 20 minutos, al día siguiente logró dar el empujón definitivo hasta encabezar la general, ya hasta el término de la competición en Dakhla, en el Sahara Occidental.
"Un tanto conservador cuando era preciso y con el antecedente del día previo, cargando un par de botellas con gasolina para evitar ese tipo de sorpresas", ha añadido.
Valero consiguió, así, alzarse campeón y marcar el mejor tiempo en motos y en coches, sacando tres horas en la general final al segundo motorista y algo más de dos horas al primero en coches.
En cuanto a sus rivales directos, ha explicado que en los primeros días un par de ellos acusaron problemas mecánicos y una penalización por llegar fuera de control "pero en las etapas siguientes, se repusieron" y ha ampliado como alguno de los pilotos checos llegaran a romper sus monturas.
Ha confirmado que, tras un breve periodo de descanso, en un par de fines de semana iniciará el campeonato de Cross Country de Castilla-La Mancha, que pretende este año completar y en el que, como aliciente, participará por vez primera su hijo Juan Carlos, de 16 años, que ya dispone de licencia para poder correr en la categoría aficionado.
Además, el 5 de marzo se enrolará en el campeonato de España de Cross Country con la intención de sacarse la 'espinita' de la anterior edición. "Espero ser capaz de ganarlo esta vez, después de haber quedado segundo en 2016", ha sentenciado.
La alcaldesa, Jacinta Monroy, ha expresado el orgullo de toda la población y la oportunidad de "poder colaborar en que siga progresando, porque Antonio es un ejemplo de esfuerzo y de superación diaria".
