El Hospital Nacional de Parapléjicos, de Toledo, ha homenajeado este miércoles a 10 deportistas que participaron en los Juegos Paralímpicos de Tokio que se iniciaron en la práctica deportiva en este centro hospitalario, entre ellos los medallistas Luis Miguel García Marquina y Eva Moral Pedreño.
El acto, que se ha celebrado en las dependencias del Hospital de Parapléjicos, ha sido presentado por su directora, Sargrario de la Azuela, y ha contado con la asistencia del presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda, y del director general de Deportes de Castilla-La Mancha, Carlos Alberto Yuste, junto a personal del centro y a pacientes y familiares.
"Siempre se dice eso de que el Hospital Nacional de Parpléjicos es un caladero de deportistas paralímpicos y así es", ha subrayado De la Azuela, quien ha añadido que la lista la abrió Gema Hassembey "la niña del hospital" en las paralimpiadas de Barcelona 92, "es cada vez más larga" si hacemos historia, hasta llegar a Tokio "donde hemos contado con una decena de deportistas, nuestros deportistas, que han participado en seis modalidades deportivas".
Asimismo, De la Azuela ha considerado que "el deporte no tiene por qué llevar adjetivos, es deporte y nada más2 y quienes lo practican, en este caso el colectivo de personas con lesión medular, son deportistas con el derecho a que se les reconozca la igualdad de trato deportivo, institucional y social".
Por su parte, Carballeda, ha dado las gracias a todos los trabajadores del hospital, al que ha definido como "un centro reconocidísimo e importante para tanta gente de nuestro país".
Carballeda ha agradecido el trabajo que se realiza en el centro en nombre "de las personas que nos ha tocado vivir con una discapacidad ", unos cuatro millones de ciudadanos en España, porque según ha dicho "Toledo recupera a las personas y no hay nada más importante que recuperar a las personas con y sin discapacidad".
"Las cosas importantes de la vida están aquí, en ese trabajo diario, poco reconocido a veces, imprescindible para que las personas puedan continuar su vida, tener una nueva oportunidad", ha considerado Carballeda, que ha aseverado que "el deporte no hace daño a nadie" y ha valorado que el Hospital de Parapléjicos contribuya "a la capacidad de ser capaces" y a la superación de personas con discapacidad a través de la práctica deportiva.
En este sentido, Yuste ha transmitido a los paralímpicos homenajeados: "Sois un referentes para todos los pacientes del hospital, también para muchos jóvenes deportistas", y ha señalado que el Gobierno regional va a hacer un esfuerzo para recuperar los niveles de práctica de deporte antes de la pandemia de coronavirus.
"Estamos muy contentos y muy orgullosos de los grandes éxitos que se consiguieron en Tokio", ha manifestado Yuste, que ha hecho hincapié en que "este acto supera lo deportivo" y ha expresado el agradecimiento a todos los trabajadores del Hospital de Parapléjicos, que han ayudado a que personas cuya vida tuvo "un cambio radical en su momento" se hayan reenganchado a ella gracias "al virus del deporte".
De los diez paralímpicos que estuvieron en Tokio e iniciaron su práctica deportiva en el Hospital de Parapléjicos han asistido al acto de reconocimiento Luis Miguel García-Marquina, medalla de bronce en Handbike, Eva María Moral Pedrero, que ganó el mismo metal en paratriatlón.
También han participado en el acto Loida Zabala Ollero, que ha finalizado entre las siete mejores en halterofilia en las últimas cuatro paralimpiadas de Pekín, Londres, Río de Janeiro y Tokio, y Miguel Ángel Toledo y Francisco José López, que participaron en tenis de mesa en la cita japonesa.
E igualmente han sido homenajeados, aunque no han podido asistir al acto, la capitana de la selección española de baloncesto en silla de ruedas, Sonia Ruiz, su compañera Almudena Montiel y el también baloncestista Francisco Javier Sánchez, así como Enrique Siscar, que compitió en tenis en silla de ruedas en Tokio, y José Manuel Abud, que lo hizo en halterofilia.
García-Marquina ha recibido el reconocimiento de manos del monitor de deportes del Hospital de Parapléjicos José Miguel López, del que se acordó al ganar el bronce en Tokio en la contrareloj de la categoría H3, donde dijo que había conseguido una medalla gracias a "un amigo" de este centro hospitalario.
A su vez, Eva Moral lo ha recibido de manos de Fernando López, que fue su fisoterapeuta durante su estancia en el Hospital de Paraplejicos.
Los cinco han agradecido el trabajo del personal del Hospital de Parapléjicos, como García-Marquina, quien ha expresado su "más profundo agradecimiento a este centro, a todos y cada uno de sus trabajadores".
"Soy lo que soy gracias a este hospital, este centro ha vertebrado el proceso rehabilitador a través del deporte, no hay medicina mejor ni más barata", ha dicho el deportista de Tarancón (Cuenca), mientras que Eva Moral ha comentado que el deporte "siempre ha sido una vía de escape", que cuando tuvo el accidente nunca pensó dejarlo y que su vida "no sería igual" sin los seis meses y medio que pasó en el centro.
De hecho, cuando cruzó la meta en tercera posición en la prueba de paratriatlón de Tokio sus primeras palabras fueron para el Hospital de Parapléjicos y para sus pacientes.
En similares términos se ha expresado, Loida Zabala, quien ha afirmado que para ella ha sido "muy emocionante" recibir este homenaje de un hospital, al que ha agradecido "haberme regalado una vida tan extraordinaria", y ha recalcado que permite que "pacientes que están en algún momento perdido, gracias al deporte pueden salir y tener una vida extraordinaria".
