El Albacete Balompié ha mostrado su "desconcierto" ante las medidas adoptadas por la autoridades sanitarias ya que "imposibilitarán llevar a cabo la acción en la que veníamos trabajando con la máxima ilusión desde hace meses: el regreso de nuestra afición al Carlos Belmonte".
En un comunicado de prensa, el club ha destacado que en coordinación con La Liga ha invertido “muchísimo tiempo y recursos en la elaboración de un detallado y seguro protocolo de vuelta de público al Carlos Belmonte que ha quedado desactivado, al menos en nuestro caso, de cara a esta trascendente recta final de campeonato a causa de unas resoluciones gubernamentales cuanto menos rebatibles”.
“A lo largo de las últimas semanas, LaLiga ha venido poniendo el acento en la incoherencia que supone la plausible presencia de público en fútbol no profesional y en un sinfín de espectáculos y que no existiese la posibilidad de albergar espectadores en eventos de fútbol profesional”, ha añadido.
De la misma manera, el club albaceteño no comprende cómo se les permite organizar el 16 de mayo un partido del Fundación Albacete femenino de Reto Iberdrola con público pero "dos días después incurriríamos en una ilegalidad si actuásemos de igual modo durante el choque que debemos jugar contra el CD Lugo", lo que denuncian como situación de agravio comparativo.
La entidad manchega ha manifestado que ha venido reclamando a las autoridades sanitarias competentes, dependientes del Gobierno central, que se “concediese la capacidad de decisión en eventos de Fútbol profesional, como ocurre con el resto de espectáculos -deportivos y culturales - a las comunidades autónomas”.
Sin embargo, esta circunstancia "no se ha producido" y originará "situaciones tan excepcionales como que Albacete, que se encuentra en fase 1 de la desescalada, no pueda albergar público en los partidos del equipo de su ciudad porque nuestra comunidad se encuentra en fase 3".
El Albacete ha instado a las autoridades “a realizar una profunda reflexión sobre la incoherencia de las medidas adoptadas y los efectos discriminatorios asociados a su ejecución" y ha propuesto que las restricciones se ajusten y equiparen a la del resto de espectáculos culturales y deportivos, cuya celebración está regulada por las comunidades autónomas y por la incidencia real en cada provincia.
