El centrocampista Riki Rodríguez se ha convertido este martes, oficialmente, en nuevo jugador del Albacete Balompié tras ser cedido por el Real Oviedo en una operación que no se pudo certificar este lunes, en el día del cierre del mercado.
Fuentes del departamento de comunicación del Albacete han informado a Efe de que la saturación de fichajes en la sede de la liga a última hora –había de plazo hasta esta lunes 31 de enero a las 23:59- y la misma situación en la Federación Española de Fútbol imposibilitaron su anuncio anoche.
Sin embargo, este martes se ha hecho oficial que el “talentoso jugador”, como lo ha definido el cuadro albaceteño, formará parte de la primera plantilla blanca hasta final de temporada, guardándose una opción de compra el Albacete.
El canterano oviedista destacó en su etapa juvenil, aunque no fue hasta la temporada 2018-19, defendiendo la camiseta del Langreo, cuando disputó 33 partidos, 29 de ellos como titular, y se ha convertido “en un baluarte del equipo cuajando una gran temporada que le sirve para regresar al conjunto oviedista”, ha detallado el comunicado de la institución albaceteña.
En la 19-20 alternó el primer equipo del Real Oviedo con su filial, debutando así en la Liga Smartbank, y durante media jugó 13 partidos con el Oviedo y 22 con el Vetusta, hasta que en enero del pasado año se marchó a Cantabria para jugar 12 partidos y conseguir cuatro dianas en medio curso con el Racing Club de Santander.
Esta campaña la comenzó en el Burgos y ha disputado diecisiete partidos con el cuadro castellano-leonés, hasta que el Oviedo finalizó su cesión para darle otra oportunidad a préstamo en las filas del Albacete Balompié, donde llevará el dorsal número 18.
