Dimite tras lograr el ascenso a Primera el presidente del Talavera, Josué Blázquez
Tras cuatro décadas ligado al fútbol, Josué Blázquez anuncia su despedida definitiva. Su carrera comenzó como jugador en el FS Talavera, y años después llegó a ser presidente de ese mismo club. Hace tres años asumió un nuevo reto al hacerse cargo de la presidencia del CF Talavera, al que definió como "el mayor desafío de su vida".
Este martes ha comunicado una decisión que ya tenía meditada hace meses: renunciar al puesto de presidente. Los principales motivos que le llevan a tomar esta decisión son sus compromisos familiares y la elevada carga laboral. En sus palabras, "sabéis lo mucho que me apasiona esto, pero es hora de dar un paso atrás. Mi hija mayor tiene ya cuatro años y me he perdido muchos momentos de su vida".
Además, Blázquez considera que su salida es ideal, ya que el reciente ascenso logrado le da un cierre perfecto. Su prioridad siempre fue "separarse del club de buena forma". Aunque el dueño del club, José Jiménez, trató de convencerle para que continuara, la decisión de Blázquez fue definitiva.
La despedida estuvo cargada de emoción e incluso las lágrimas del ex presidente no pudieron evitarse. Aprovechó para destacar el esfuerzo del resto del equipo directivo, el departamento de marketing y prensa, reconociendo que han sido años complicados y en ocasiones "han sentido que estaban solos". Por eso, alcanzar el ascenso representa para él un verdadero milagro, fruto de "hacer magia con escasos recursos".
Ahora Blázquez planea tomar unas merecidas vacaciones, disfrutar de su familia y desconectarse por completo del móvil. Se retira con la tranquilidad de saber que el club está en buenas manos, aunque lamenta no haber podido concretar algunos asuntos pendientes, como la presentación de la indumentaria nueva o la apertura de la ciudad deportiva.
El puesto de presidente queda vacante, si bien todo apunta a que Miguel Ángel Sandoval, recientemente nombrado Director General del Talavera, será quien asuma la presidencia. Mientras tanto, el equipo blanquiazul encara con ilusión una temporada exigente en Primera Federación, marcada por cambios tanto en el banquillo como en la gestión institucional.