Difícil situación la que ha tenido que resolver la selección de Castilla La Mancha benjamín de fútbol sala en el estreno del Campeonato de España de la temporada 15/16. Como suele ocurrir en el primer partido, los jovencísimos e inexpertos futbolistas acusan el escenario y la importancia del evento, aflorando así los ineludibles nervios que hacen temblar las piernas.
De tal guisa salió a la pista el equipo que tenía que defender el título conseguido el pasado año, demasiada responsabilidad para la juventud de los futbolistas. Además, el rival, Extremadura, demostró tener un gran equipo en esta categoría. Con estas premisas ocurrió lo normal: igualdad extrema en el juego de ambas selecciones, y muchas ocasiones. Los postes escupieron tres balones de Extremadura y Castilla La Mancha se topó con un inconmensurable portero extremeño. La consecuencia de ello fue un resultado corto. No se abrió el marcador hasta el minuto 2 de la segunda parte y fue a cargo del castellano manchego Sergio. Incrementó el marcador Nico para Castilla La Mancha, en el 9 de este segundo período, pero Extremadura redujo distancias, de doble penalti a falta de escasos segundos para el final del encuentro, lo que imprimió una gran dosis de emoción a los instantes finales.
Pero ya no hubo tiempo para más y Castilla La Mancha se impuso, con mucha dificultad y agonía, rubricando así una de las tareas más difíciles de un campeonato de estas características: ganar el primer partido.
Castilla La Mancha se enfrentará este viernes a La Rioja.
