El bolañego Matías Gómez ha asegurado que quiere "olvidar" su mala actuación en el mundial absoluto de kárate, en la categoría kumite -60 kilos, disputado en Linz (Austria), pese a llegar "bien preparado, con mucha ilusión".
En declaraciones a Efe, Gómez ha achacado su eliminación a las primeras de cambio a que "no encontré la forma adecuada" porque "los campeonatos tienen muchas vicisitudes", entre ellas las sensaciones que, ha reconocido, "no fueron buenas y eso marcó la competición".
El bolañego se estrenó con derrota ante el holandés Geoffrey Berens (2-0), subcampeón mundial hace dos años y que, a la postre, entró en la final, en un combate "muy fuerte y duro" y que fue "un golpe duro que acuse en el combate de repesca".
Precisamente, en la repesca por la medalla de bronce Gómez volvió a ser derrotado, esta vez por el tunecino Nader Azzouizi (6-5), sin que sepa explicar que "me pudo pasar, quizá un mal día" porque ha rechazado que fuera por tema de nervios.
Matías Gómez ha concluido la temporada en la que sido campeón de Europa y del mundo Universitario, además de bronce en la I Copa Iberoamericana, entre otros logros, y se ha fijado como gran objetivo para el próximo año el europeo y la disputa de la Premier League, "donde espero estar en lo más alto y ser olímpico en Tokio 2020" donde el kárate comparece por primera vez, ha concluido.
