El pivote exinternacional hispano cubano Rolando Uríos ha agradecido el recibimiento "muy especial" que ha recibido en la vuelta a las pistas tras 13 años sin hacerlo y a los 51 años, en el duelo de rivalidad capitalino.
"La verdad es que ha sido muy especial ver el 'Puerta de Santa María' casi lleno, con más de 1.500 espectadores, y agradezco tanto a los aficionados del Alarcos como los del Caserío su recibimiento", ha reconocido el mítico jugador.
Uríos ha desvelado que pensó "que no iba a jugar porque tenía una contractura en el gemelo", pero que el físio le puso una cinta y pudo "entrar al partido" y ha precisado: "Me han llegado tres o cuatro balones, he podido marcar dos goles, provocar un penalti y estoy satisfecho".
"Me hubiera gustado marcar tres o cuatro goles más, pero los chicos tienen que aprender a jugar conmigo y yo con ellos", ha asumido Uríos, quien sobre su estado físico, ha reseñado que le hubiera gustado sentirme "mejor" para admitir: "Tengo que fortalecer la rodilla más todavía, pero vamos poco a poco".
El jugador del Alarcos, sobre el choque, que acabó con derrota de su equipo (25-29), ha resumido: "Hemos fallado todos los lanzamientos de siete metros, hemos tenido pérdidas de balón y eso lo ha sabido aprovechar el Caserío", para concluir que "tenemos que ir partido a partido y entrenamiento a entrenamiento".
"Es el primer partido de liga, eran dos puntos fundamentales, pero no hemos podido sumarlos y lo intentaremos a la próxima", ha sentenciado.