El Atlético Almonacid consiguió este pasado fin de semana una brillante victoria, primera de la temporada, frente al Renacer Argamasilla. Lo hizo en el Polideportivo León Felipe, ante una afición entregada con el conjunto amarillo. El triunfo, pese a lo exiguo del resultado, fue más que merecido. “Ha sido fruto de la dinámica que llevábamos en los últimos partidos, en los que habíamos competido bien, sin que nuestro buen juego tuviera el refrendo de los puntos”, comentaba ayer por la tarde tarde el míster almonacileño, Diego Martín.
El Atlético Almonacid fue mejor que su rival en el inicio del partido, dominando el juego y creando ocasiones claras, “que como nos pasa siempre, no entraron”, dice Martín. El equipo sigue trabajando esta faceta del juego, “quizá la más importante, porque llegamos con facilidad, pero necesitamos muchas ocasiones para marcar, muchas más que nuestros rivales”, sigue.
El Atlético lo pasó mal en los últimos diez minutos de la primera parte, “en los que experimentamos un bajón físico fruto del esfuerzo por adelantarnos que habíamos hecho desde el inicio”, añade el míster. Afortunadamente para las filas almonacileñas, no encajaron gol cuando peor lo estaban pasando, y con el empate se llegó al final de los primeros veinte minutos. “Los malos momentos, hoy no nos han pasado factura”, resumía anoche el entrenador.
Tras el paso por el vestuario, el compromiso de los chavales con la victoria seguía siendo excelente, y el juego defensivo solidario, de manera que los amarillos volvían a dominar y las ocasiones llegaban. “Mis jugadores han trabajado muchísimo. Cuando mejor estábamos jugando, y a diferencia de otros partidos, hemos marcado nosotros, y no el contrario”, sigue el míster.
Así, en el minuto 8 de la segunda parte llegaba el 1-0. Lo marcó Adrián. El tanto llegaba como fruto de un robo en primera línea de defensa. Jarol se hizo con el cuero, disparó y su rechace llegó a Adrián, que no falló en boca de gol. Renacer Argamasilla se la jugó con portero-jugador, pero el Atlético defendió bien la superioridad numérica, impidiendo las ocasiones del rival. “Hoy ha estado bien el equipo entero, ha peleado, se ha dejado el alma”, laureaba Martín. El portero Fran, que debutó ayer, lo hizo francamente bien, con paradas de mérito en la primera mitad. Alex, el titular, “también ha estado soberbio”. La victoria llegó como fruto de esa buena labor bajo palos, que se vio refrendada por trabajo defensivo notable.
