El director del Festival del Cine y la Palabra (CIBRA), Gabriel Castaño, ha mostrado su satisfacción por el buen desarrollo de esta VIII edición, y ha afirmado que "después de muchos esfuerzos, una vez más CiBRA ha dado más satisfacciones que quebraderos de cabeza".
Ha vuelto a agradecer la implicación de las instituciones para lograrlo y así, ha puesto en valor el trabajo y las aportaciones de los ayuntamientos de Toledo y La Puebla de Montalbán, así como de la Diputación Provincial y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Por eso, ya ha avanzado que el trabajo para la próxima edición comienza "ya mismo", porque pese a estos buenos resultados, la vocación del festival "pasa cada año por seguir mejorando y llevar a Toledo a lo más alto en cuanto a festivales de cine".
Miles de personas han formado parte de esta VIII edición del festival de cine CiBRA, que se celebró entre los días 18 y 27 de noviembre, cuando llegó a su fin con una gala de entrega de premios, que congregó a unos 1.000 espectadores, ha informado CIBRA en nota de prensa.
Una de las novedades que "han resultado más atractivas" ha sido la sección gastronómica y sus 'Palomitas en Premiére', donde se han mostrado las dotes de los cocineros toledanos, cuya reinterpretación de las palomitas "hizo las delicias de las cientos de personas que las probaron". Esta sección se quiere seguir manteniendo en las próximas ediciones del festival.
También ha contado con buena participación la sección literaria, que este año ha rendido homenaje al poeta Luis García Montero y ha acogido la presentación del libro 'Amigo Labordeta', una parte del festival que también se quiere reforzar para acentuar la diferencia de CiBRA con respecto a otros festivales.
La organización del festival también ha mencionado las III Jornadas de Cine y Educación, donde decenas de docentes de toda España pusieron en común sus experiencias en cuanto al uso de las herramientas audiovisuales como elemento educativo.
