El cantaor toledano Israel Fernández ha encontrado en la figura de Pastora Pavón "un universo mu grande", alrededor del cual giran "planetas" como Tomás Pavón o Pepe Pinto, cantores que considera "sus referentes" y a los que dedica su último disco "Universo Pastora", ha declarado en una entrevista con Efe.
Fernández lleva en los escenarios "desde chiquitito": con tan solo 18 años grabó su primer disco y desde entonces ha compartido tablas con figuras como Raimundo Amador o José Mercé y participó también en el espectáculo musical "Flamenco hoy" del cineasta Carlos Saura, que para Fernández supuso cumplir "todo un sueño".
"La vida te pone las cosas en el camino", asegura Fernández (Toledo, 1989), que fue criado en un ambiente "muy gitano y muy flamenco" donde siempre sintió un "gran interés" por la música y el cante, que para él es "su modo de vida".
"El cante es como un miembro mío, como un dedo o como una mano, viene conmigo. No he hecho otra cosa en la vida", reconoce el músico, que a los 14 años se quedó paralizado cuando escuchó por primera vez a Pastora Pavón, más conocida como "La niña de los Peines", a la que el toledano dedica su nuevo disco "Universo Pastora (Universal), aportando "un sabor más moderno".
"Pastora estaba muy avanzada en su tiempo, tenía un ritmo, una afinación y un compás excelentes", asegura Fernández, que "no intenta copiar ni imitar los cantes antiguos" sino "trasladarlos con más música" y "cantarlos con su voz y su propia verdad".
"El flamenco expresa una verdad muy grande en sus letras, que están cantadas con pena, con fatiga, con nostalgia y con una enorme fuerza", explica el músico, al que le vienen constantemente letras de seguiriyas y soleás, que para él "cuentan todo" en muy pocas palabras.
Fernández lleva escuchando flamenco toda la vida y mientras que sus primos o hermanos jugaban al fútbol o hacían "otras cosas de la edad", él escuchaba los cassetes de su padre porque para él "en el flamenco es más importante escuchar que ir" y lo ve más como un espectáculo musical que visual.
Fernández es un enamorado del cante antiguo, de Juanito Mojama, Fernanda de Utrera, Manuel Torre o Pepe Marchena y aunque asegura que "la época dorada del flamenco ya ha pasado", al género "no le hace falta de ná" porque tiene una "fuerza y un carisma especial" que hace que llegue a la gente joven y a diversas partes del mundo.
"El flamenco no necesita fusión. No estoy en contra pero yo ahora estoy en un momento en el que fusiono flamenco con flamenco, le echo lo mismo pero de forma diferente. Yo cojo un cante de 1928 y lo hago ahora, lo actualizo, más fresco, con otra letra, con otra armonía", explica.
Sin embargo, Fernández asegura que también le gustan otros géneros como el jazz o el reggae porque para él "la música no es racista y no tiene un solo color" y menciona trabajos que para él son fuente de inspiración como el álbum "Omega" de Enrique Morente, que colaboró con el grupo de rock Lagartija Jack o "La leyenda del Tiempo" de Camarón.
Fernández ha sido alabado por artistas como Sara Baras, Miguel Poveda o Arcángel, que le han augurado un futuro prometedor y le han llegado a comparar con Camarón, que para él significa "un halago mu grande" a pesar de que considera que "están a años luz".
De hecho, las ambiciones del joven músico no van más allá de "tener salud, libertad para cantar y poder morirse cantando", pues según dice "no pretende ser famoso sino llegar al corazón de la gente" y aportar "su granito de arena al flamenco".
Fernández estará en Madrid con los temas de su nuevo disco el próximo 21 de mayo en el Teatro Alfil y participará también en el Festival Suma Flamenca de la capital el 10 de junio y en el Flamenco On Fire en Pamplona el 22 de agosto.
