El Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro ha logrado amortizar la deuda de algo más de 1,3 millones de euros que venía arrastrando desde 2010.
La deuda del festival se conoció en 2010, dos meses antes de la presentación de la programación de la 33ª edición del festival, coincidiendo con la llegada a la dirección del evento de la actual directora, Natalia Menéndez.
Una auditoría realizada por los nuevos responsables de este evento cultural reveló la existencia de una deuda que se estimó en 1.342.217,83 euros, una cifra que, han asegurado hoy en un comunicado, "era muy superior a la que en un primer momento se pudo presumir".
La deuda estaba contraída con varias entidades financieras, por líneas de crédito y préstamos suscritos, por un importe de 949.934,75 euros y con proveedores y empleados por un importe de 392.283,08 euros.
Tras tomar las riendas del festival, la dirección puso en marcha un plan para amortizar la deuda que se inició con la reformulación del presupuesto inicialmente previsto para la 33ª edición, lográndose en un primer momento afrontar las deudas a proveedores y empleados.
Logrado este primer objetivo, el Festival de Almagro se propuso rebajar, en la medida de lo posible, la deuda con las entidades financieras.
Así lo propuso la directora del festival durante la Junta del Patronato que tuvo lugar en diciembre de 2010, donde ya se dio a conocer que en sólo unos meses después se había reducido el total de la deuda en un 31,39 %.
Menéndez ha recordado en un comunicado que la difícil situación económica que vivió a partir de ese año el festival, al coincidir con los "recortes" que sufrió y que se reflejó en el presupuesto de la 34ª edición, que descendió en un 28,83 % respecto a la edición anterior, "hacían prácticamente imposible destinar algo del presupuesto a seguir amortizando la deuda heredada".
Lo que sí logró el equipo de dirección fue una renegociación de las líneas de crédito y préstamos con las entidades financieras, con lo que se redujeron "notablemente" los costes financieros.
Ante tal situación, la nueva propuesta financiera planteada por la dirección del Festival y el impulso de una fórmula de gestión, logró concitar el interés de los patronos de "aunar esfuerzos y llevar a cabo aportaciones extraordinarias que permitiesen eliminar la deuda financiera existente".
De esta forma, el Instituto Nacional de Artes Escénicas (INAEM) se comprometió a hacer frente al 46 % de la deuda, la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha al 41 %, la Diputación Provincial de Ciudad Real del 7 % y el Ayuntamiento de Almagro del 6 % del total de la deuda.
Cada patrono propuso un calendario de pagos para poder asumir y dar cumplimiento a su compromiso, que finalmente ha concluido con la amortización del 100 % de la deuda.
