La actriz Marisa Paredes lamenta, en una entrevista con Efe, que la cultura en España "nunca, desgraciadamente, ha sido valorada, protegida ni querida" y añade que tampoco ha habido ningún buen ministro ni ministra de Cultura, salvo Carmen Alborch, "pero de eso hace mucho tiempo".
Galardonada este fin de semana con el premio San Pancracio Honorifico del Festival del Cine Español de Cáceres, asegura que "son cargos que no se han preocupado por la cultura, y la prueba está en que rara vez se les ve en un teatro o un concierto”.
La actriz (Madrid, 1946) reconoce que ha trabajado mucho a lo largo de su trayectoria desde que debutó en 1960 con un breve papel en la comedia "Los económicamente débiles", de Pedro Lazaga, ya que su filmografía incluye más de un centenar de títulos.
En este sentido, confiesa que, ya vacunada, la pandemia le ha servido "para valorar más la vida” y que acaba de ser abuela “hace apenas una semana” de una niña con nombre cinematográfico, Telma, pero lamenta que el coronavirus ha hecho que vaya a costar "que el público vuelva a las salas”.
En este punto, reflexiona ante el desembarco masivo de las plataformas audiovisuales en los hogares, que ha provocado la crisis de la covid.
“Están muy bien y dan trabajo, pero no pueden sustituir a una sala", asegura Marisa Paredes, que apuesta "por hacer una ofensiva", para lo que se necesita "un verdadero apoyo para redescubrir lo que es el cine. El cine es magia, aventura y conocimiento”.
A su juicio, "tiene que haber un empeño en transmitir la cultura cinematográfica" y se pregunta "por qué no se enseña a Buñuel o a Berlanga en la escuela o el instituto, si el arte del cine es el que mejor transmite la historia".
Respecto al futuro inmediato, señala que tiene pendiente de estreno “Las cartas perdidas”, una cinta independiente que hace un recorrido vital por las misivas de 13 presas republicanas.
Se trata de un documental ficcionado, escrito y dirigido por Amparo Climent, cuyo hilo narrativo son una serie de cartas reales de mujeres exiliadas o encarceladas durante la Guerra Civil, en cuyo reparto también están actrices como Luisa Gavasa, Nora Navas y Alba Flores.
Explica que la película “se ha realizado en cooperativa, nadie ha cobrado”, y se lamenta del retraso en poner en marcha una ley de mecenazgo en España para promover la financiación cultural.
“Está muy bien cuidar la cultura, pero la cultura no existe sola; hay que difundirla, protegerla y ayudarla. Porque es fundamental para el desarrollo de una sociedad libre”, añade la actriz, que recuerda una frase que le dijo Bernardo Bertolucci: "Ahora no hay censura, pero hay una peor: la censura económica”.
La actriz defiende el “cine comprometido y con mensaje" y descubrir de nuevo "la represión y la injusticia enorme que fue el franquismo, porque se nos olvida el pasado; la gente joven no sabe ni quién fue Franco”.
En este sentido, afirma que la libertad no es solo poder tomarse una caña, "es algo mucho más fundamental y necesario. La cultura es libertad”.
