Santiago Segura estrena para contribuir a que la sociedad supere la COVID-19

"Estoy acongojado por la situación en la que está la humanidad y en concreto nuestra sociedad, y la economía del país. Creo que debemos ser más juiciosos con los rebrotes, yo no digo que no se tenga precaución, pero el miedo paraliza", y los cines, enfatiza, son lugares muy seguros
Santiago Segura estrena para contribuir a que la sociedad supere la COVID-19
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Santiago Segura estrena "Padre no hay más que uno 2: La llegada de la suegra" en medio de la mayor incertidumbre que ha sufrido nunca la industria del cine porque "la sociedad tiene que sobrevivir a esto".

"Todo lo que tengo me lo ha dado el cine; y esperar a estrenar en otro momento, pues es que igual luego están cerrados los cines. Y también la alegría que le vas a dar a un montón de familias que la esperan. Yo creo que es una buena idea", ha dicho a Efe.

Las entrevistas promocionales de la película se realizan en La Estación Gran Teatro Príncipe Pío de Madrid, un proyecto que el cineasta ha tardado en sacar adelante después de tres años de obras y que, a los diez días de su apertura, hubo que cerrar por la pandemia.

"Estoy acongojado por la situación en la que está la humanidad y en concreto nuestra sociedad, y la economía del país. Creo que debemos ser más juiciosos con los rebrotes, yo no digo que no se tenga precaución, pero el miedo paraliza", y los cines, enfatiza, son lugares muy seguros.

"La sociedad tiene que sobrevivir a esto", sabiendo que "el mismo idiota que bebía y luego cogía el coche es el que sale sin mascarilla o se mete en el metro con fiebre", apunta Segura.

Aún así, no solo estrena su película mientras otros proyectos nacionales e internacionales continúan esperando un mejor momento, sino que lo hace antes de lo previsto. "Inconsciente, más que valiente, que rima", sonríe Segura.

Confía en que la película tenga "no sólo el boca-oreja", sino que aliente la recuperación de la experiencia de ir al cine. "No se puede vivir de repetir Los Goonies, que es muy divertida, pero...".

Esta segunda parte se empezó a rodar casi al terminar la primera, vista la velocidad a la que ganaba espectadores -hasta sumar los 2,5 millones-, con los mismos actores, Segura repitiendo como Javier, el padre, y Toni Acosta como la madre, y los cuñados Leo Harlem y Silvia Abril. Con ellos, la incorporación gloriosa de Loles León convertida en la abuela de la familia, que viene a ayudar por el inminente nacimiento de un nuevo bebé.

"Hasta en la vida real, las suegras son muy cómicas", apunta León, que defiende a su Milagros: "somos muy mediterráneos y muy espontáneos" y por eso, dice, "saltan chispas".

Esta abuela rejuvenecida aparece nada menos que con un cachorro para cumplir los deseos de los nietos y fastidiar a Javier, el padre, con el que mantiene una guerra abierta.

"Ha sido uno de los rodajes más felices que he tenido, ha sido 'el rodaje' de este año. He descubierto a estos niños adorables, tan puros: con ellos hemos hecho plastilina todo el rato, ha sido una comunión muy fluida, y ningún mal rollo", dice mirando a Segura, que levanta las cejas, bromista.

Apenas han crecido unos centímetros, pero han ganado tanto en confianza ante la cámara que estos cinco actores infantiles parecen una familia de verdad.

La mayor, Sara (Martina de Antioquía), empieza a fijarse en los chicos; la siguiente, Carlota (Calma Segura) es aún más ecologista; Rocío (Luna Fulgencio) quiere ser andaluza para que la cojan en los castings, Dani (Carlos González Morollón) no quiere otra niña en la familia, y la pequeña, Paula (Sirena Segura) continúa con sus problemas de lenguaje, aún más cómica si cabe.

Salvo las hijas de Segura, todos llevan amuletos para dar suerte a la película; hace solo un año, la experiencia fue muy diferente, cuentan, pero no todos lo han pasado mal en el confinamiento: tanto Carlos, como Martina, aseguran que son tan caseros que él "no ha notado diferencia" y ella hubiera seguido igual si hubiera podido ir de compras.

La youtuber, que ya acumula en su canal cuatro millones de suscriptores, ha dedicado unos minutos antes de sentarse ante la prensa a grabarse unos videos en TikTok, mientras los pequeños la imitaban.

Los niños, que según Segura, parece que se hayan hecho un máster de interpretación en tan poco tiempo, son los principales protagonistas de esta segunda parte donde, como es habitual en el cine de Segura -y tan buen resultado le ha dado con las cinco entregas de "Torrente"- está plagada de cameos, cada uno más divertido que el anterior.

"Lo que más me divierte es pensar el casting, y me gusta sorprenderme a mi mismo como el primer espectador", así que, se le ocurre y luego tiene la suerte de tener amigos muy graciosos.

Y ahí están cómicos como Florentino Fernández, Carlos Areces o José Mota, y actores "espontáneos" como Lorenzo Caprile, Chicote, Ainhoa Arteta, Nuria Fergó o Lorena Verdú, además de una sorpresa de la canción española.

El productor, guionista y protagonista, es en esta cinta compositor e intérprete de la canción que cierra: "Me gusta que la gente salga sonriendo del cine, y salvo el 'Apatrullando la ciudad', no compongo ni canto, ni nada (...) es un efecto como en las bodas, cuando ponen las sevillanas para que se vayan".

"Padre no hay más que uno 2: la llegada de la suegra" se estrena mañana en cines de toda España cruzando los dedos para que sea, como toda la industria espera, el empujón que devuelva al público a las salas.

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