La compañía 'Miseria y Hambre, el violinista Ara Malikian y un festival de clausura del Año Jubilar de la Misericordia son los espectáculos que esta semana llenará el Teatro Auditorio de Cuenca de música, luz y mucha diversión.
Serán, por orden, este jueves, viernes y sábado y contribuyen a las actividades con las que este año Cuenca celebra el XX Aniversario de la Declaración de Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Así, este jueves 17 a partir de las 20.30 horas el Teatro Auditorio de Cuenca acogerá la obra 'Lucille LaBelle', un montaje de la compañía 'Miseria y Hambre'. El espectáculo recrea el imaginario del cine mudo y conjugará la música, proyecciones de luz y sonido y la magia del teatro, todo hilado con una historia de amor que conseguirá trasladar al espectador una obra de música, otra de teatro y una película.
La trama está ambientada en 1927, en la noche de un gran estreno cinematográfico con la sala a rebosar. El protagonista es acomodador y proyeccionista que al ver en persona a la actriz Lucille LaBelle, queda enamorada de ella e intentará conquistarla mezclando el cine con el teatro, ha informado Cuenca 20 aniversario en un comunicado.
El viernes, el violinista armenio Ara Malikian volverá a la capital conquense con su espectáculo '15, una carrera tan salvaje' a partir de las 20.30 horas en la sala principal del Auditorio. Lo hace con las entradas ya agotadas con una obra en la que repasará sus quince años sobre los escenarios españoles, donde interpretará desde clásicos de siempre hasta rock más actual, o incluso viviendo una fiesta con los artistas flamencos.
Para acabar la semana, el sábado el Teatro Auditorio de Cuenca acogerá el festival diocesano de clausura del Año Jubilar de la Misericordia organizado por Cáritas Diocesana Cuenca y la delegación local de Manos Unidas a partir de las 17 horas. En dicho festival se darán cita multitud de coros y grupos parroquiales de la provincia, como el de Rumanía, al mismo tiempo que participarán cantautores del centro penitenciario de la capital.
La recaudación de este festival irá destinada a la ayuda de los refugiados de Tánger, gracias a un compromiso que Manos Unidas de Cuenca adquirió con Monseñor Agrelo, obispo de dicha localidad. Estos fondos los llevarán en peregrinación hasta el país africano para también conocer a aquellos que van a ayudar.
