El hasta ahora presidente de la Confederación de Empresarios de Cuenca, CEOE-Cepyme Cuenca, Abraham Sarrión, ha dimitido de su cargo después de quince años al frente de la patronal, una decisión que ha tomado por motivos "absolutamente personales" aunque ha mencionado también la dedicación que le exigen sus proyectos empresariales a lo largo de este año.
Así lo ha dado a conocer Sarrión en declaraciones a los medios con motivo de la Asamblea General de CEOE Cepyme, marco en el que ha explicado que no está "cansado" y que se trata de una decisión tomada "sin presión alguna" para dar el relevo.
Dejará todo los cargos de la patronal, aunque seguirá como presidente de la Junta Directiva de la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción y afines de Cuenca, APYMEC, que considera su "casa" y desde la que continuará intentando "recomponer" un sector que considera "vital" para la completa recuperación económica y la creación de empleo.
Se va con el "convencimiento más absoluto" de que ha llegado el "momento de dar este cambio", después de casi cuatro legislaturas al frente de CEOE CEPYME Cuenca cuando su compromiso inicial, dice, era para dos legislaturas. En estos años ha "aprendido mucho" al lado de empresarios "leales, comprometidos y generosos" con su persona, de los que se lleva "muchos buenos momentos" y otros "no tanto", que estaban "implícitos en el cargo".
La suya ha sido una "experiencia inolvidable", de la que extrae el trabajo "bien hecho de mucha gente" en un "lugar muy complicado" como Cuenca. También el cariño de muchas personas que han colaborado con CEOE CEPYME Cuenca a lo largo de este tiempo, considerando que deja "una familia" con la que ha compartido "gran parte" de su vida y que, afirma, está "preparada" para realizar una "transición modélica", con "absoluta normalidad" tras un momento que "debía llegar algún día".
En sus agradecimientos ha reconocido el "compromiso, esfuerzo e incondicional apoyo" de todos los miembros de los órganos de gobierno y ha puesto en valor el "incuestionable esfuerzo y dedicación" de todos los empleados y directivos de la Confederación. A las administraciones públicas ha agradecido el "trato brindado" que, a su entender, es el que "merece" la organización de empresarios, a quienes ha solicitado el mismo compromiso con el nuevo presidente.
Agradecimiento especial para su familia, socios y directivos de sus empresas, cuya "generosidad y mayor esfuerzo" le han permitido dedicar parte de su tiempo a su labor presidencial, por lo que espera haber estado "a la altura" de lo que ha representado.
RELEVO SEGÚN ESTATUTOS
Tal y como dictan los estatutos de CEOE CEPYME Cuenca, al cesar el presidente la vacante recae en el vicepresidente primero de la organización, David Peña, un empresario "sobradamente preparado", según Sarrión, vinculado, desde muy joven, a organizaciones empresariales y que ha aceptado el cargo "sabedor del compromiso que adquiere" con el tejido empresarial de la provincia.
Para él Sarrión ha pedido el mismo apoyo que ha recibido a lo largo de estos quince años en los que ha tenido que tomar "decisiones difíciles", pero que han resultado ser "siempre las correctas", lo que ha hecho "aún más fuerte" a la Confederación y le ha valido para ganar en "credibilidad".
Por su parte, visiblemente emocionado, David Peña se ha mostrado dispuesto a continuar con la línea de trabajo iniciada por Sarrión, al que le ha agradecido su labor y cercanía durante estos quince años.
A este respecto, ha admitido sentirse "respaldado" por el cien por cien del Comité Ejecutivo y la Junta Directiva y ha advertido de que, "a partir de mañana", el equipo se pone a trabajar en esta nueva etapa para una organización cuya dinámica de trabajo no va a sufrir "grandes variaciones", puesto que el equipo sigue y el Comité Ejecutivo va a continuar "dándolo todo por esta Confederación".
Un equipo que agotará el año que le queda de legislatura y apostará por la "cercanía" que ha determinado la relación entre la Comisión Ejecutiva y el empresariado de la provincia.
