El Ayuntamiento de Villaescusa de Haro (Cuenca) ha reclamado que se investigue el origen del foco de viruela ovina y caprina que ha obligado a sacrificar a 24.000 reses en la localidad y ha pedido a la Administración "indemnizaciones justas" para las empresas afectadas que permitan su supervivencia.
Así lo ha señalado, en declaraciones a EFE, el alcalde de Villaescusa de Haro, Cayetano Solana, después de que este fin de semana haya concluido en la localidad el sacrificio de 24.000 animales afectados por esta enfermedad erradicada en España hace medio siglo.
Según el regidor, es necesario que se investigue el origen del foco y que se "depuren responsabilidades" después de que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación notificara el pasado mes de septiembre seis focos de esta enfermedad en Villaescusa de Haro.
La primera notificación en España tuvo lugar el 22 de septiembre en una explotación de vino de Benamaurel (Granada), donde se registró el virus de Viruela Ovina y Caprina (VOC), que se sumó a los de una explotación de carne de Cúllar, en la misma provincia.
Según el Ministerio, se trata de una enfermedad no zoonósica que afecta exclusivamente a las especies ovina y caprina, "sin que en ningún caso pueda transmitirse al ser humano, ni por contacto directo con los animales ni a través de los productos de los mismos".
Asimismo, el Consistorio de Villaescusa de Haro, una localidad de poco más de 600 habitantes, ha reclamado "indemnizaciones justas" para las empresas afectadas, que permitan su "supervivencia".
En este sentido, ha indicado que entre 50 y 60 puestos de trabajo tienen un futuro incierto y algunos trabajadores ya han sido despedidos en el pueblo.
Sin embargo, otros intentarán salir adelante, por lo que ha demandado que la Administración les ayude tras "este duro golpe" que no tiene "precedentes" y que afecta a la localidad pero también a la economía de la comarca.
Una de las empresas se dedicada a la producción de leche y la otra era un cebadero.
