Cáritas de Cuenca atendió a más de 3.000 personas durante el año pasado 2019

El presidente de Cáritas ha destacado la labor de la organización diocesana durante el estado de alarma, en el que han seguido prestando servicios como el reparto de comida a domicilio o el albergue de transeúntes
Cáritas de Cuenca atendió a más de 3.000 personas durante el año pasado 2019
photo_camera Cáritas de Cuenca atendió a más de 3.000 personas durante el año pasado 2019

Cáritas de Cuenca atendió durante el año 2019 a un total de 3.022 personas a través de sus distintos proyectos y ha alertado de que durante la pandemia ha prestado ayuda ya a casi un tercio de esta cifra, por lo que ha augurado que las necesidades de la población se van a multiplicar en los próximos meses.

Durante una rueda de prensa para presentar la Memoria de 2019, el presidente de Cáritas de Cuenca, José Martín, ha destacado la labor de la organización diocesana durante el estado de alarma, en el que han seguido prestando servicios como el reparto de comida a domicilio o el albergue de transeúntes.

En este sentido, ha aplaudido la labor de los casi 300 voluntarios de la organización que, en su mayoría, son personas mayores y por tanto población de riesgo frente a la COVID-19.

Según Martín, han conseguido pasar estos meses con un solo caso de contagio y fallecimiento en la residencia que Cáritas gestiona en la localidad de Huete (Cuenca), y han seguido prestando el servicio del albergue de transeúntes.

Asimismo, ha añadido que gracias a un acuerdo alcanzado en el mes de enero, Ayuntamiento y Junta han convenido sufragar los gastos de este albergue para que Cáritas lo gestione y permanezca abierto los 365 días del año.

Por su parte, la responsable de Comunicación de Cáritas, Paz Ramírez, ha indicado las dificultades de mantener en confinamiento a personas sin hogar, acostumbradas a vivir en la calle.

Ha señalado que durante la crisis sanitaria han atendido a muchas personas que no habían acudido durante un tiempo a pedir ayuda, y también a otras familias que nunca habían recurrido a la organización diocesana.

Respecto al balance del pasado año, Ramírez ha mencionado un “sinhogarismo crónico” en Cuenca, donde entre seis y ocho personas viven diariamente en la calle.

Comentarios