La Confederación de Empresarios de Cuenca (CEOE-Cepyme Cuenca) ha defendido su plan de movilidad, que pasa por sustituir el tren convencional Madrid-Cuenca-Valencia por un transporte alternativo a demanda, que mejoraría las comunicaciones de la provincia, ahorraría costes y ganaría en eficiencia.
El presidente y el secretario general de CEOE-Cepyme Cuenca, David Peña y Ángel Mayordomo, respectivamente, lo han presentado con detalle este viernes en una rueda de prensa, tras haber avanzado su contenido a finales de junio en la asamblea general anual de la organización empresarial.
Peña ha resaltado que no se quiere suprimir servicios, sino "mejorarlos", dado que el objetivo es mejorar la comunicación tanto de la capital como de la provincia, mientras que Mayordomo ha apuntado que lo que existe ahora es un tren con "vías arcaicas".
"Los datos que nos daban son de un viajero por estación y día", ha apuntado Mayordomo, quien ha criticado que en los últimos treinta años no se haya hecho una inversión eficiente y eficaz en este medio de transporte.
Así, han planteado mejorar la comunicación con los pueblos y la capital con un epicentro que sería la estación del tren convencional, donde llegarían los transportes de los pueblos para desde este punto tener una comunicación rápida con la estación del AVE, situada a las afueras de la ciudad.
La organización empresarial mantiene que de esta forma se acortarían los tiempos de conexión, no solo entre los pueblos y la capital de la provincia, sino también de estas localidades con la propia Cuenca, con Madrid y con Valencia, con una conexión "mucho más rápida y en la propia capital, como ahora se está haciendo en Aranjuez y en Utiel".
Otros aspectos que recoge el plan es cambiar los raíles por vías verdes en las que el ciudadano puede practicar ciclismo o senderismo, ganando espacios y potenciando el turismo rural, y además se incluye un arreglo de los apeaderos para que puedan ser explotados como recurso turístico.
Por otro lado, CEOE-Cepyme Cuenca plantea que en las poblaciones en las que el paso de las vías del tren suponen dividir su territorio, como Cuenca, Tarancón o Carboneras de Guadazaón, sean sus ayuntamientos los que decidan como sustituir estos terrenos, que según la organización empresarial "muchas veces son un foco de peligro y de suciedad, sumando ahora estas zonas para el disfrute de sus vecinos".
Los responsables de la organización empresarial conquense han considerado que, una vez aprobado, es el momento de dar a conocer el plan entre administraciones, partidos políticos, vecinos, asociaciones e incluso Adif, para buscar respaldo y poder llevarlo a cabo.
Por otra parte Peña ha negado que exista algún interés especulativo en el plan, como ha apuntado la confluencia Podemos-Equo en el Ayuntamiento de Cuenca esta semana, al ser preguntado al respecto por los medios de comunicación.
