La ley orgánica de regulación de la eutanasia, en vigor desde junio de 2021, se ha aplicado por primera vez en Castilla-La Mancha a Fátima García, una conquense de 50 años, natural de Tribaldos, que sufría una enfermedad degenerativa de nacimiento.
Fátima García habló con CMM en noviembre de 2021 y su testimonio se ha difundido este miércoles, un día después de su fallecimiento en el Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, donde ha sido atendida por personal sanitario bajo los preceptos de la ley de eutanasia, tal y como ella había solicitado.
La eutanasia de Fátima García, que estudió Psicopedagodía en la Universidad Pontificia de Comillas, fue autorizada el 23 de diciembre por el Comité de Garantías de Castilla-La Mancha tras haber pasado varias entrevistas.
En su relato a CMM, Fátima afirma: "Me iré y seré feliz, seré muy feliz porque me voy de un cuerpo que no me deja ser lo que soy".
Asimismo, explica que debido a una enfermedad rara que le produce distonía general y no tiene cura, junto a la artrosis, no puede dormir y asegura que su patología no tiene tratamiento, mientras que las alternativas que le han propuesto "no funcionan".
