Ante el juez por estafar casi medio millón en ajos a agricultores de Cuenca

Lo han hecho en el marco de la operación Licaon contra el investigado, acusado de estafar a agricultores de la provincia de Cuenca a los que les compró ajos y cebollas por valor de 480.000 euros que abonó con pagarés sin fondos

Detenido un menor acusado de incendiar una vivienda para matar a su abuela y su tío. En la imagen un agente de la Guardia Civil durante la detención
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La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial en calidad de investigado a un empresario acusado de estafar casi medio millón de euros a agricultores de Cuenca a los que compró ajos y cebollas que abonó con pagarés sin fondos y de apropiarse de contenedores valorados en casi 95.000 euros.

Según ha informado en un comunicado este cuerpo armado, han puesto a disposición judicial como investigado a un hombre de 51 años, vecino de Vícar (Almería) y sin antecedentes, como presunto autor de un delito de estafa y otro de apropiación indebida.

Lo han hecho en el marco de la operación Licaon contra el investigado, acusado de estafar a agricultores de la provincia de Cuenca a los que les compró ajos y cebollas por valor de 480.000 euros que abonó con pagarés sin fondos.

Además, estafó a las empresas de transportes que contrató para trasladar los productos, a las que tampoco ha pagado dinero alguno, y se apropió de los 829 palets en los que se depositaron los ajos y cebollas, valorados en más de 94.500 euros.

Este individuo también dejó de pagar pronto el alquiler de la nave que ha utilizado como base de operaciones y a los trabajadores que contrató.

El equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Maracena se hizo cargo de la investigación el pasado marzo tras la denuncia del propietario de una empresa de transportes de Fuente Vaqueros que alertó del impago de los portes que había hecho para una empresa de Atarfe que se dedicaba a la compraventa al mayo de frutas y verduras.

Los agentes descubrieron entonces que había muchas más víctimas detrás de esta empresa y pusieron en marcha esta operación.

El ahora investigado se había hecho cargo de esta empresa en el año 2018, y la usó para estafar a las víctimas, a las que compró el producto que vendió a terceros por 382.000 euros, como hizo con las cajas.

El acusado solo abonó la fianza del alquiler de la nave y de las cámaras frigoríficas que utilizó y no volvió a pagar ninguno de los meses de alquiler ni a los trabajadores que contrató. 

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