El Comité de Empresa del Centro de Atención a Personas con Discapacidad Intelectual Grave (CADIG) "El Crisol" de Cuenca va a realizar movilizaciones semanales para exigir a la empresa Eulen, adjudicataria de este servicio, que se siente a negociar con ellos y respete la legalidad laboral.
Este órgano ha considerado que la empresa está ignorando a los representantes de los trabajadores y ha exigido que "recapacite" y cambie de actitud, al tiempo que ha lamentado que la Junta de Comunidades, que es la administración competente en esta materia, no haya actuado a pesar de que se le han comunicado los conflictos con la adjudicataria.
La presidenta del Comité de Empresa, Pilar Chicano, ha acusado a la dirección de la empresa de imponer turnos sin negociar con los trabajadores o no cubrir las bajas que se producen entre el personal.
Ha afirmado que en los cinco años que han pasado desde la primera adjudicación, han tenido nueve procedimientos judiciales y hay otros cuatro pendientes.
Todo ello, afirma Chicano, fue trasladado al Gobierno de Castilla-La Mancha en una reunión con el delegado de la Junta en Cuenca, Ángel Tomás Godoy, pero ha lamentado que no se ha tomado ninguna medida.
Por ello han decidido iniciar movilizaciones, para que la empresa reconsidere su postura y llegue a acuerdos con los trabajadores.
Las movilizaciones se realizarán varios viernes consecutivos, a las 11.00 de la mañana, primero en el centro, luego en la sede de la empresa en Cuenca y por último ante la sede de la Delegación de la Junta.
Los representantes de los sindicatos CCOO y UGT, que respaldan al Comité de Empresa, han criticado la actitud de la empresa y le han emplazado a negociar.
El CADIG "El Crisol" tiene cerca de 90 trabajadores y atiende a medio centenar de residentes y usuarios del centro de día.
