La empresa pública municipal Aguas de Cuenca acometerá durante los próximos días las obras de reparación de los daños causados por la entrada de raíces en un tramo de 96,2 metros del colector ubicado bajo el paseo de la margen derecha del río Júcar, frente al polideportivo municipal El Sargal, y que presta servicio al barrio de San Antón y a la zona de los institutos.
Los trabajos consistirán en la instalación de una membrana de materiales compuestos y polimerización en el interior del tubo de hormigón de 600 milímetros de diámetro que devuelva al colector la estanqueidad necesaria para el correcto flujo de las aguas residuales, informó el Ayuntamiento en nota de prensa.
Las obras, que tendrán una duración aproximada de cinco días, comenzarán con la derivación de las aguas mediante una manguera exterior para facilitar los trabajos. A continuación, se limpiará la canalización, se inspeccionará el conducto mediante un robot dotado con cámara de televisión a color y se eliminarán las raíces existentes.
Posteriormente, a través de los cuatro pozos existentes en el tramo, se introducirá un tubo de poliéster de un centímetro de grosor que, mediante agua caliente a presión, se hinchará para que se solidifique y se adhiera a la pared interior del colector. Por último, un robot cortará la membrana en los lugares en los que existen acometidas.
Aqualogic, bajo la supervisión de los técnicos de Aguas de Cuenca, será la encargada de realizar los trabajos, en los que se invertirán 38.200 euros.
Esta actuación no causará ninguna interferencia en el servicio a los usuarios. Sin embargo, durante el desarrollo de las obras se cortará el acceso para peatones a esta zona del paseo del Júcar debido al reducido espacio existente.
Antecedentes
El pasado mes de abril el colector que discurre por el margen derecho del río Júcar sufrió un colapso parcial como consecuencia de la entrada de raíces por las juntas de los tubos de hormigón y la consiguiente sedimentación de los arrastres. En aquella ocasión, se fresaron las raíces y se aspiraron los sedimentos para restablecer el correcto funcionamiento.
Con el objetivo de solventar definitivamente el problema, los técnicos de la empresa pública Aguas de Cuenca estudiaron las posibles soluciones, decantándose finalmente por el encamisado y descartando la sustitución del colector que conllevaría la apertura de zanjas en una zona de difícil acceso.
