El principal acceso a las Casas Colgadas de Cuenca, el edificio más emblemático de la capital conquense, se ha reabierto este lunes a los peatones tras varios meses cerrado por seguridad.
Así lo comunicado en una nota el consistorio, en la que ha explicado que, aunque se permitirá el acceso temporal para peatones, permanecerá cerrado al tráfico rodado.
Esta medida facilitará la comunicación entre el puente de San Pablo y las Casas Colgadas tras comprobar que "la superficie se ha estabilizado", han precisado las mismas fuentes.
El concejal de Patrimonio, Miguel Ángel Valero, ha explicado que, de los 46 puntos de medición, solamente dos se han movido "con una oscilación de apenas tres milímetros en las últimas semanas".
Para llegar a esta conclusión se ha llevado a cabo un trabajo de campo consistente en colocar clavos de acero, tanto en el muro como en el suelo y en la pared del tramo de calle Canónigos, entre el puente y el emblemático edificio.
El corte se produjo el pasado mes de octubre tras detectar un importante rebaje en la calzada y grietas en el pavimento y en el propio muro.
En las próximas semanas seguirán las mediaciones para "obtener el diagnóstico más preciso y, con esos datos, intervenir para su solución", ha asegurado Valero.
