Ayuntamiento de Cuenca comienza a limpiar zonas de vertidos incontrolados

Ayuntamiento de Cuenca comienza a limpiar zonas de vertidos incontrolados
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El Ayuntamiento de Cuenca ha empezado la limpieza de 13 zonas de vertidos incontrolados que han sido detectadas en la ciudad, que va a prolongarse durante un mes y costará casi 87.000 euros al Consistorio.

En declaraciones a Efe, el concejal de Servicios a la Ciudad, Pedro José García Hidalgo, ha hecho un llamamiento a vecinos y empresas para que no depositen los residuos en lugares sin control, porque el gasto que supone luego su retirada a las arcas públicas es muy elevado y además genera un impacto ambiental negativo.

García Hidalgo ha explicado que un metro cúbico de escombros puesto en la puerta de uno de los dos gestores de estos materiales que hay en Cuenca cuesta 10 euros, mientras que depositarlo en un vertedero incontrolado cuesta a las arcas públicas 100 euros.

Asimismo, ha recordado a los ciudadanos que existe un limpio frente al Centro Comercial El Mirador, donde se atiende a los particulares para depositar allí residuos voluminosos, así como que las empresas deben de gestionar sus residuos a través de un gestor autorizado, tal como establece la legislación.

Sin embargo, los vertidos acumulados desde hace años en 13 zonas de las afueras de la ciudad han obligado a presupuestar una partida de 86.775,07 euros para que una empresa se encargue de su retirada, ha señalado García Hidalgo.

El concejal de Servicios a la Ciudad ha apuntado que esperan retirar toneladas de residuos de construcción, pero también electrodomésticos, ruedas e incluso cabezas de animales muertos.

Los trabajos, que se extenderán por espacio de un mes, consistirán en el traslado y tratamiento de los residuos por gestores autorizados, así como la correcta restauración de los terrenos a su estado original.

Todo el proceso contará con la supervisión del Servicio de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Cuenca.

Según García Hidalgo, la mayor parte de los residuos se acumulan en el barrio de Villa Román, una zona en expansión de la capital en el que todavía hay muchos terrenos sin construir próximos a las viviendas de este barrio residencial.

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