La quincuagésimo séptima edición de la Semana de Música Religiosa ha comenzado en Cuenca con la misión de acercar la música sacra a todos los públicos, al tiempo que consolidar su excelencia con el estreno absoluto de obras de encargo que la han puesto en el mapa internacional en el último medio siglo.
En una entrevista con Efe en el oficio de vísperas en la Catedral, el director del festival, Cristóbal Soler, ha señalado que "la buena música debe ser un derecho universal", por lo que la programación de esta edición ofrece una batería de propuestas para todos los públicos.
La primera de ellas ha sido el concierto del Sábado de Gloria en el templo principal de la ciudad, con un recital del ciclo "SMR Antigua", en el que participaron Juan Carlos Asensio y Schola Antiqua, un grupo especializado en la interpretación de la monodia y de la polifonía medievales.
El concierto rozó el lleno a pesar del día plomizo y las gélidas temperaturas que se registran estos días tanto en la ciudad de Cuenca como en el interior de la seo conquense.
La programación ofrece hasta el próximo 8 de abril desde actividades gratuitas que llegan a residencias u hospitales como el Virgen de la Luz, además de las pedagógicas a un precio simbólico de 5 euros.
Todas ellas se complementan con la programación principal de la Semana de Pasión, en la que figura la obra de encargo que se ha pedido este año al compositor de doble nacionalidad, española y norteamericana, Juan José Colomer.
El estreno absoluto de "Magnificat" tendrá lugar el miércoles 28 de marzo en el Teatro Auditorio de la ciudad, y durará aproximadamente treinta minutos, según ha adelantado Soler, quien ha destacado que la obra está pensada para coro y quinteto de metales.
Su legado se sumará a otras obras de encargo estrenadas en Cuenca como "Cantos", de Francisco Coll en 2017; las de James Wood y Héctor Parra en 2016, Joan Magrané Figuera en 2015, María de Alvear (Premio Nacional de Música) en 2015 o Carlos Ruiz de Castro en 2001.
También a otras de hace décadas como la de Joaquín Rodrigo en 1965, Cristóbal Halffter en 1963 o Alberto Blancafort en 1962.
El grueso de la programación lo conforma un ciclo denominado "Semana de Pasión", dedicado al oratorio, que incluye cinco conciertos de Bach.
Así, el Martes Santo se interpretará bajo la batuta de Marc Minkowski "La Pasión según San Mateo", de Johann Sebastian Bach, mientras que el Jueves Santo será la Amsterdam Baroque Orchestra & Choir, dirigida por Ton Koopman, la encargada de interpretar "La Pasión según San Juan", del compositor alemán.
Precisamente, con estos dos conciertos se buscará llenar el Teatro Auditorio de Cuenca.
También es previsible que tenga muy buena respuesta de público el que tendrá lugar en la iglesia de la Navidad de Nuestra Señora de Arcas, donde se interpretarán el Sábado Santo cantatas y arias del barroco europeo.
Según Soler, la venta de localidades en algunos conciertos se ha incrementado significativamente este año, donde antes de empezar la programación se habían vendido más del 60 por ciento de las localidades.
Ha recordado que, gracias a los patrocinios, en Cuenca es posible disfrutar de grandes artistas internacionales a precios asequibles, en torno a los 35 ó 40 euros, a diferencia de lo que ocurre en grandes ciudades donde se paga el doble.
Sobre el público, el director del festival ha señalado que para disfrutar de esta edición han llegado grupos de Noruega, Francia, Suecia o Alemania, lo que permite atenderlos "a la carta".
También es habitual ver matrimonios llegados desde muchos rincones del mundo y otros melómanos como William, quien ha señalado, en declaraciones a Efe, que ha llegado a Cuenca con muchas ganas de disfrutar de la buena música.
Por último, el director del cuarto festival de música más antiguo de España ha avanzado que ya tiene cerrada cerca del 80 por ciento de la programación del año que viene.
"Perseguimos mantener la excelencia, la calidad y sobre todo la afluencia para que sea un éxito", ha subrayado.
