Vecinos del barrio Pío XII de Ciudad Real reclaman mantener el centro de salud

Vecinos del barrio Pío XII de Ciudad Real reclaman mantener el centro de salud
Los residentes rechazan el traslado del consultorio al edificio de la antigua Delegación de Sanidad y exigen que se cumpla el plan inicial que preveía su permanencia en el barrio. Denuncian que el cambio perjudicará a personas mayores y con movilidad reducida.

El barrio de Pío XII, en Ciudad Real, vive días de movilización vecinal ante la decisión de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha de trasladar el centro de salud del barrio al edificio de la antigua Delegación de Sanidad, en la confluencia de las calles Obispo Estenaga y Postas. Los vecinos reclaman que el consultorio se mantenga en su actual ubicación y que se cumpla el compromiso inicial recogido en el Plan de Modernización 2025, que contemplaba la demolición del viejo hospital de Alarcos y la construcción de un nuevo centro sanitario en su lugar.

Durante la última semana, medio centenar de vecinos —según algunas fuentes, cerca de un centenar— se han concentrado frente al centro de salud para expresar su rechazo al traslado. Portando pancartas y carteles con mensajes como “El centro de salud no se toca” o “Pío XII quiere su centro en el barrio”, los manifestantes aseguran que no están dispuestos a permitir que el servicio se aleje de su entorno.

Más de mil firmas y una plataforma vecinal

La movilización ha cristalizado en la creación de la Plataforma Vecinal en Defensa del Barrio de Pío XII, que ha recogido más de un millar de firmas y ha iniciado una campaña en redes sociales para frenar el cambio. Sus representantes han remitido escritos al presidente regional, al consejero de Sanidad, al Defensor del Pueblo de Castilla-La Mancha, al alcalde de Ciudad Real y al propio Ayuntamiento, reclamando que el centro siga prestando servicio en el mismo emplazamiento.

Según han denunciado, la única respuesta recibida hasta el momento proviene del alcalde, que ha señalado que el Consistorio “se mantiene al margen” al tratarse de una competencia directa de la Junta. Una postura que los vecinos lamentan y consideran una falta de apoyo institucional a una demanda que, insisten, “no es política, sino de sentido común y de justicia con el barrio”.

Un servicio esencial para 27.000 usuarios

El centro de salud de Pío XII atiende a más de 27.000 tarjetas sanitarias de Ciudad Real y municipios cercanos. Los vecinos subrayan que su traslado supondría un perjuicio directo para personas mayores o con movilidad reducida, que tendrían que desplazarse a una zona más alejada y con peor acceso peatonal. “Muchos usuarios vienen andando; si lo quitan de aquí, tendrán que coger el coche o depender de familiares”, lamentan.

También cuestionan la idoneidad del edificio al que se pretende trasladar el servicio, la antigua Delegación de Sanidad, un inmueble que consideran “obsoleto y poco accesible”. “No tiene sentido dejar un barrio sin su centro de salud para llevarlo a un edificio viejo que requiere reformas”, señalan. Además, recuerdan que el Plan de Modernización preveía aprovechar el solar del antiguo hospital de Alarcos —actualmente en desuso y en mal estado, “lleno de ratas y palomas”— para construir unas instalaciones nuevas, modernas y con zonas verdes alrededor.

Un barrio que se siente olvidado

La reivindicación de Pío XII se suma a una sensación de abandono que los vecinos aseguran arrastrar desde hace años. Reclaman inversiones en servicios públicos, equipamientos y mantenimiento urbano, y ven en este conflicto un ejemplo más de la falta de atención al barrio. “Nos prometieron un centro nuevo y ahora quieren quitárnoslo; parece que solo se acuerdan de nosotros en campaña”, expresan varios residentes.

A la espera de una respuesta de la Junta, la plataforma vecinal ha anunciado que continuará con las concentraciones y no descarta nuevas movilizaciones si la decisión no se revoca. Su objetivo, aseguran, es claro: que el centro de salud siga donde siempre, en el corazón del barrio.