Los trabajos que se han iniciado en la planta de coker del complejo industrial de Repsol en Puertollano, con motivo de la "parada" que se ha iniciado este mes y que se prolongará hasta marzo, permitirán situarla entre las más competitivas del sector, más eficientes y más seguras.
Así lo ha destacado esta compañía en una nota, en la que ha precisado que la unidad de coker produce carbón como subproducto último del petróleo y esta obra, en la que se invertirán 19 millones de euros, consiste en sustituir el sistema manual de cierre y apertura de fondo de las cámaras por un sistema automático con el que se minimizarán riesgos y se logrará una mayor eficiencia.
El objetivo fundamental es mejorar la seguridad de la planta, ya que cada doce horas se procede al cierre y apertura de las cámaras, lo que, en un futuro, se harán automáticamente.
Además, se evitarán riesgos minimizando la posibilidad de derrames de carbón o proyecciones de agua caliente.
Repsol ya dispone de esta tecnología en otros complejos industriales del país y el objetivo es implementarlo en el de Puertollano.
La parada que se está realizando en Puertollano afecta, además de la planta de cocker, a otras secciones del complejo industrial de Repsol en cuyas mejoras se están invirtiendo en estos dos meses un total de 75 millones de euros.