El Ayuntamiento de Tomelloso (Ciudad Real) ha negado que haya despedido a once trabajadores del Servicio de Ayuda a Domicilio como denunció hace unos días la Federación de Empleados y Empleadas Públicos (FeSP) de UGT Ciudad Real, y que sólo se ha cumplido una decisión judicial.
La concejala de Personal, Montse Moreno, ha explicado que las trabajadoras "firmaron en 2016 un contrato de duración determinada, con su correspondientes fecha de inicio y de finalización a 31 de diciembre de 2017 y que, llegada esa fecha, se procedió a terminar la relación contractual", ha informado el Consistorio en nota de prensa.
Ha añadido que las empleadas, haciendo uso de sus derechos, interpusieron recurso en el que solicitaban ser reconocidas como personal indefinido "al pensar que debido a la relación laboral que habían mantenido con el Ayuntamiento con anterioridad así lo determinaba".
No obstante, ha aclarado que esa relación laboral, aunque se ha alargado más de lo aconsejable en el tiempo, siempre se ha prestado en periodos intermitentes, bien porque se dieron circunstancias de años en los que no trabajaron o bien porque salieron a trabajar en puesto diferentes, interrumpiendo la continuidad en el mismo puesto de trabajo.
La concejala ha añadido que "en la actualidad, dos de las once afectadas están trabajando en la actualidad", que ha insistido en que "lo único que se ha hecho es cumplir la sentencia del pasado 29 de junio del Juzgado de lo Social, que resolvió que se debía proceder o bien a readmitirlas o a indemnizarlas, posibilidad esta última que el equipo de Gobierno ha considerado más adecuada al interés general".
Moreno ha recordado que durante el año 2017 se procedió a regularizar la situación laboral de un importante número de trabajadores, con contratos transformados en indefinidos, "proceder que se ha mantenido mientras la Ley nos lo ha permitido y siempre que se cumplieran los requisitos que marcaba".
Aquí, ha aclarado que el 29 de junio el Gobierno Central modificó la ley e impidió a cualquier Administración transformar contratos temporales en indefinidos con consecuencias penales en caso de un incumplimiento.
La concejala de Personal ha señalado que las once trabajadoras no son fijas, "sino indefinidas y no tienen plaza", ya que el Ayuntamiento es una Administración pública y la única vía de acceso a un contrato fijo pasa por un proceso selectivo y que cualquier otro contrato (eventual, interino o indefinido) se puede rescindir en el momento en que la plaza sea ocupada o finalice el motivo de la contratación.
La intención del equipo de Gobierno "es, en el momento que la Ley lo permita y se desbloquee esta situación legislativa, convocar todos aquellos procesos selectivos para cubrir las plazas vacantes que hasta la fecha están siendo cubiertas de forma temporal", ha admitido.
Asimismo, ha justificado que "la situación viene provocada por un mal planteamiento de las bolsas de trabajo, al haberse convocado durante años con carácter anual y renovándose año tras año, impidiendo que las bolsas se movieran y que aquellas personas que se encontraban en los puestos más bajos no tuvieran opciones de entrar a trabajar en el Ayuntamiento".
"Esta concatenación de contratos ha obligado al equipo de Gobierno a tener que regularizar más de 80 contratos en lo que llevamos de Legislatura", ha recordado Moreno quien ha concluido que "la duración actual de las bolsas son de dos o cuatro años".
